«Representa una paradoja que en nuestro país hayamos luchado tanto por salvar las vidas de los 33 mineros y tengamos simultáneamete a 34 comuneros mapuches que atentan contra sus propias vidas a través de una huelga de hambre», dijo el mandatario frente a los jefes de Estado y de gobierno que asisten al encuentro del organismo internacional en Nueva York.
En su esperado discurso ante la Asamblea de las Naciones Unidas, el Presidente Sebastián Piñera restó legitimidad este jueves a la huelga de hambre que por 73 días mantienen 34 presos mapuche que exigen que no se les aplique la Ley Antiterrorista.
Sin aludir a los motivos que tienen para mantener su prolongado ayuno, el mandatario puso en tela de juicio el hecho que los comuneros «pongan en riesgo sus vidas», lo cual contrastó con los esfuerzos que realiza el gobierno para rescatar con vida a los 33 mineros que permanecen atrapados a 700 metros de profunidad en la mina San José.
«Representa una paradoja que en nuestro país hayamos luchado tanto por salvar las vidas de los 33 mineros y tengamos simultáneamete a 34 comuneros mapuches que atentan contra sus propias vidas a través de una huelga de hambre», dijo Piñera frente a los jefes de Estado y de gobierno que asisten al encuentro del organismo internacional el Nueva York.
Piñera reiteró también que su administración está abierta a dialogar para resolver las demandas que en su conjunto tienen los pueblos originarios y resaltó la conformación de una mesa de diálogo para discutir esas materias, a pesar que varios de los sectores convocad0s ya anunciaron que no se sumarán a la iniciativa debido a que no resuelve el tema más urgente, que es el fin de la huelga de hambre.
«Hemos constituido una mesa de diálogo integrada por el gobierno, las iglesias, la sociedad civil y nuestros pueblos originarios, particularmente el pueblo mapuche, en la cual vamos a reforzar la agenda del reencuentro histórico con la iniciativa más poderosa que nunca se haya realizado en Chile en esta materia, que es el plan Araucanía», dijo el Presidente.
Previamente manifestó la necesidad de entregar las oportunidades que por siglos se les han negado a las etnias, «y por ello estamos promoviendo en nuestro país el reconocimiento constitucional de todos nuestros pueblos originarios, dejando atrás la estrategia de la asimilación para seguir la estrategia de la integración, respetando y valorando y protegiendo su idioma, su cultura, sus tradiciones, que son parte de las riquezas más profundas de nuestro país».
