La activista y Premio Nobel de la Paz 1992 recibió este viernes, en el marco de un seminario organizado por la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, la solicitud de Natividad Llanquileo, para que participe en calidad de observadora en la audiencia que se realizará el próximo 8 de noviembre en contra de los comuneros acusados del ataque al fiscal Mario Elgueta.
La líder indígena guatemalteca y Premio Nobel de la Paz 1992 Rigoberta Menchú se reunió con organizaciones de derechos humanos y representantes del pueblo mapuche.
La activista indígena ofreció una conferencia como parte del seminario «Educar para el Bienestar. Desafíos de las terapias naturales en tiempos de transformación«, organizado por la Universidad Academia de Humanismo Cristiano. En la ocasión dictó la clase magistral “Ser y estar en este tiempo”.
Tras el evento, Menchú mantuvo una reunión con Natividad Llanquileo, vocera de los presos políticos mapuches recluidos en la Cárcel El Manzano, de Concepción, quien le pidió que participe en calidad de observadora en el conflicto mapuche.
Específicamente en el juicio oral que se realizará el próximo 8 de noviembre en contra de los comuneros acusados del ataque al fiscal Mario Elgueta y de atentados incendiarios en el tribunal de cañete. El Ministerio Público espera en aquella instancia obtener condenas efectivas.
Asimismo, Llanquileo pidió a Menchú “que se acerque a conocer las condiciones en que se encuentran recluidos los comuneros mapuche, quienes llevan más de año y medio en prisión preventiva en algunos casos”.
Sin embargo, explicó que sus compromisos políticos con Guatemala y «la propia coyuntura actual del país está exigiendo más presencia allá», por lo que a corto plazo negó la posibilidad de involucrarse en el proceso mapuche.
En el marco de su visita a nuestro país, la Premio Nobel de la Paz animó a los «hermanos mapuches a continuar con su lucha» apelando a la unidad de los pueblos indígenas como «única salida para defender y proteger nuestros valores y cultura milenaria».
«Apoyo la lucha del pueblo mapuche y apelo a la humanidad de este sistema occidentalizado y materialista que por la fuerza quiere aniquilar la cultura mapuche», sostuvo.
En esa línea, repudió la criminalización de los pueblos indígenas. «La ignorancia de querer destrozar por todos los medios una herencia milenaria y unos valores ancestrales es la manifestación más grande de intolerancia y racismo», resaltó.
De todos modos, adelantó que a partir de 2012 impulsará la creación de unas mesas de observación para «actualizar qué ocurre realmente con los pueblos indígenas de América».
«Cuando me comprometo a observar un conflicto particular lo hago con todo esmero, porque requiere una dedicación permanente y profesional», expresó.
La líder indígena guatemalteca participará mañana en un encuentro con el mundo de los derechos humanos, en la Villa Grimaldi, y por la tarde sostendrá un diálogo con jóvenes y dirigentes indígenas en torno al tema: “Desafíos de una Sociedad Inclusiva e Igualitaria”, en el Museo Histórico Nacional.
