Si bien nunca estuvo de acuerdo con la propuesta del ahora ministro de Defensa, Andrés Allamand, para dar una salida legislativa a un problema que va en aumento, nada hacía presagiar que el senador UDI entraría tan decididamente al debate. La semana pasada, trascendió que elabora un documento en el que intenta darle una solución al tema pero cerrándole la puerta a un eventual matrimonio homosexual. La iniciativa del parlamentario tomó por sorpresa al gremialismo.
Nada bien cayó en la UDI la propuesta alternativa que elabora el senador Jovino Novoa en relación al polémico tema de las uniones de hecho. Por lo pronto, la mayoría asegura haberse enterado por la prensa de que el parlamentario pensaba levantar su propia opción, pese a que el partido, de manera institucional, encargó a algunos legisladores desarrollar una que lo representara a cabalidad. Tanto como para presentar un proyecto que le hiciera el peso al del ex senador Andrés Allamand en el Congreso.
Pero como ya es costumbre, todo indica que el ex timonel traspuso los límites que el mundo más conservador de la colectividad quisiera cruzar. Tal como ha trascendido, la idea es que los convivientes, sean hetero u homo sexuales, efectúen un Acuerdo de Administración de los Bienes adquiridos durante dicha convivencia. Es decir, supeditado solamente al patrimonio, a diferencia del que plantea el hoy ministro de Defensa, que abarca un aspecto más amplio de la relación y al que el gremialismo se opone de plano.
En general la directiva, que fue tomada por sorpresa, no se ha pronunciado abiertamente sobre la propuesta que elabora Novoa, pues salvo lo que trascendió a la prensa, desconocen su contenido. Además plantean que la UDI mandató a una comisión para que presentara una iniciativa que representara la postura oficial frente al caso. Sin embargo, un parlamentario que admite desconocer la idea del senador, estima que “Jovino está buscando interpretar a un grupo importante que ha mostrado discrepancias con la proposición original de la UDI”. Ello, porque según admite, “mucha gente no quería ni aproximarse al tema (de las uniones de hecho), porque sienten que no hay necesidad de legislar sobre la materia porque creen que equivale a abrir un primer acercamiento al matrimonio homosexual”.
[cita]La directiva de la UDI fue tomada por sorpresa y no se ha pronunciado abiertamente sobre la propuesta que elabora Novoa, pues salvo lo que trascendió a la prensa, desconocen su contenido.[/cita]
En este escenario, para un importante sector del partido resulta llamativo que el senador por Santiago Poniente apostara por entrar al debate con una posición propia. Para otros no tanto, porque estiman que lo que busca el parlamentario “es mostrar un poco más de apertura y pragmatismo en estas materias para idealmente ampliar el espectro”. Lo cual es percibido, por algunos en la tienda, como una estrategia razonable, desde el punto de vista electoral, pero también porque hay que “abrirse a dar solución a los problemas que afectan a la gente común y corriente, porque nos guste o no, cada vez más parejas, del tipo que sean, optan por convivir o deben hacerlo por razones legales que les impiden contraer matrimonio”.
Quienes se suman a la corriente “pragmática” no son necesariamente la mayoría del partido. Para un importante grupo esos son temas a los que la UDI no debería aproximarse, porque insisten en que “nos traen más problemas internos y no hacen que la gente cambie la imagen que tiene de nosotros”, plantea un dirigente de base de la tienda que, derechamente, duda que sea positivo para el gremialismo avanzar en tópicos que son más bien del ADN de la centroizquierda.
Así las cosas, todo indica que el gremialismo trata de avanzar a contrapelo en el tema de las convivencias y aunque la directiva optó hace semanas por hacerse cargo y liderar el debate, la avanzada de Novoa se cruza con la intención de la mesa de promover un consenso que deje conforme a moros y cristianos al interior del partido. Pero sin alejarse de la línea que el gobierno esté dispuesto a trazar en esta área.
Y aunque no son pocos los que observan con suspicacia la arremetida de Novoa en una materia tan polémica al interior del partido, también los hay quienes estiman que otra mirada al debate es positiva. Ese es el caso del diputado Carlos Recondo. A su juicio, si bien la directiva generó instancias para la discusión y para que quien lo deseara pudiera entregar su mirada sobre el tema, “eso no opta para que un senador pueda estructurar una propuesta propia, para luego lograr consensuarla y hacerla parte de la propuesta oficial del partido”. De lo contrario, dice, puede seguir los carriles normales dentro de la tramitación del proyecto que llegue al Congreso.
Por lo pronto, no sería la primera vez, ni quizás la última, que el ex timonel tiene una postura distinta a la de la gran mayoría de la UDI respecto a materias valóricas que durante muchos años han sido tabú en el gremialismo. Sin ir más lejos, hace unos años criticó el hecho de que un significativo grupo de diputados de la Alianza llevara el tema de la distribución de la llamada “píldora del día después” al Tribunal Constitucional, por lo que se ganó duras críticas de sectores más conservadores de la derecha. Cosa que no parece importarle demasiado al senador que, cada cierto tiempo, se desmarca de las cúpulas partidistas. Lo que en las filas del partido se atribuye al hecho de que como “Jovino y Pablo (Longueira) se han ganado el derecho a discrepar y la historia, muchas veces, ha terminado demostrando que tenían la razón”, dice una fuente que no le da mayor importancia a las consecuencias que dentro del partido pudiera tener esta nueva embestida del parlamentario.
