El senador advirtió que «la Contraloría no debe prestarse para escenografías del gobierno, ni para manipular a la opinión publica reuniéndose con el Ministro de Vivienda para la entrega del informe, pues fuimos nosotros los que denunciamos los hechos del caso Kodama, no el Minvu».
El senador del MAS Alejandro Navarro calificó como «un débil intento de lavado de imagen» la reunión del ministro de Vivienda con el Contralor General programada para el próximo jueves, para la entrega del informe del órgano fiscalizador sobre el caso Kodama.
Para el parlamentario «el primer denunciante del bullado caso Kodama ante Contraloría fui yo, no el gobierno. El informe a Contraloría debe ser entregado a todos los actores y no sólo al gobierno. La reunión del Ministro de Vivienda con el Contralor del día jueves no debe provocar monopolio de información, menos a quienes lo que les interesa es no salir jurídica y políticamente trasquilados».
Según el legislador, la Contraloría «no solo debe ser ecuánime e imparcial, sino que también debe parecerlo. La entrega del informe no debe ser convertida en una ceremonia de gobierno, tanto mas si los antecedentes que se entregaran implicarían y harían responsables a conspicuos y dilectos asesores, funcionarios y ex funcionarios de confianza del gobierno del Presidente Piñera».
De acuerdo a Navarro, «este informe es de total relevancia pues determinara las responsabilidades preliminares de los involucrados y fijara el marco de la investigación contable y administrativa, que es importante pues es independiente de las responsabilidades penales».
Asimismo señaló que «el informe de Contraloría establecerá quien será el vencedor del clásico universitario entre el IDIEM de la Universidad de Chile y el DICTUC de la Universidad Católica. Las Universidades deben hacerse responsables de sus informes, y el supuesto abultamiento en favor de Kodama por el informe del DICTUC puede acarrear responsabilidades incluso penales para quienes los firmaron»
Para el senador «de establecerse diferencias sustanciales, las universidades deberán tomar medidas para aclarar como se redacto el informe, su metodología, etc., pues particularmente los dos informes del DICTUC fueron el fundamento de un cobro que hasta ahora muestra solo irregularidades. Las Universidades deben hacerse responsables de sus dictámenes «.
«Es por ello que necesitamos que el informe sea entregado a todos, no solo al Ministerio, quien es parte interesada. Aquí el único imparcial es la Contraloría, y debe resguardar esa imparcialidad compartiendo su informe con todos, no solo con quienes les interesa que no se establezca delito alguno», concluyó Navarro.
