Se trata de una práctica que en Chile no está regulada como un medio de prueba, sino que constituye una diligencia importante para la etapa de investigación.
La directora ejecutiva de Fundación Paz Ciudadana, Javiera Blanco, entregó este jueves al Fiscal Nacional, Sabas Chahuán, el estudio “El reconocimiento de imputados en Chile y a nivel comparado: Aportes de la experiencia de España, Inglaterra y Estados Unidos”, cuyo objetivo es relevar aquellas buenas prácticas observadas internacionalmente en la materia y que sirvan de base para el establecimiento de protocolos del actuar de los operadores del sistema.
Participaron en la ejecución de la investigación, la directora del Área Justicia y Reinserción de Fundación Paz Ciudadana, Ana María Morales, y el abogado investigador Gherman Welsch.
El estudio analiza la normativa chilena sobre la materia, tanto antes como después de la entrada en vigencia de la Reforma Procesal Penal y posteriormente, efectúa un análisis de los tres países en estudio: España, Inglaterra y Estados Unidos.
En particular, se aboca a describir cómo se desarrolla la diligencia, cuáles son los estándares que deben seguir las policías en la práctica de ésta, los distintos problemas probatorios que pueden acarrear el reconocimiento y las buenas prácticas observadas.
Paz Ciudadana explicó que actualmente el reconocimiento de imputados en Chile no está regulado como un medio de prueba, sino que constituye una diligencia importante para la etapa de investigación. Existe el reconocimiento fotográfico y el reconocimiento en rueda de personas. Por su parte, las policías cuentan con manuales internos que entregan sugerencias metodológicas para su práctica.
En España existe el reconocimiento fotográfico y rueda de personas, el cual está regulado en su legislación, el que se pueden practicar ante la policía, el Ministerio Fiscal o ante el juez instructor. Se ha admitido por alguna jurisprudencia, la identificación del imputado por medio del reconocimiento de la voz.
Asimismo, en el Reino Unido también encontramos los mismos mecanismos, regulados en códigos de práctica, pero además, es ampliamente utilizado en dicho país el reconocimiento por medio de video (sistema Viper).
En el caso de Estados Unidos, considerando los problemas asociados al reconocimiento, el año 1998, el Instituto Nacional de Justicia, convocó a un grupo de expertos sobre la materia, junto con los operadores del sistema, a fin de estudiar la manera en cómo mejorar la forma de recolectar y conservar la evidencia de los testigos presenciales. En octubre de 1999 salió a la luz el producto de esta comisión: Eyewitness Evidence: A Guide for Law Enforcement, documento que si bien no tiene rango legal, resulta una guía útil para su práctica, y el cual ha sido adoptado por diversos Estados.
La principal recomendación del estudio apunta a que la práctica de la diligencia de reconocimiento tanto del fotográfico como en rueda, sea lo más detallada posible, de manera de reducir ostensiblemente el espacio de discrecionalidad.
Por otro lado, para el debido resguardo de los derechos de los imputados, particularmente en caso del reconocimiento fotográfico de personas detenidas, y en el reconocimiento en rueda tanto de personas privadas o no de su libertad, se aconseja que se comunique a la defensa la práctica de esta diligencia.
Asimismo, considerando que estas diligencias reposan en la memoria del testigo que puede verse alterada o que puede ser objeto de sugestiones de carácter interno o externo, se recomienda construir investigaciones que no reposen exclusivamente en el reconocimiento practicado por la víctima o el testigo, siendo aconsejable que se recabe suficiente evidencia de carácter pericial, documental o testifical, que complemente adecuadamente la línea de investigación.
