Según el ex legislador “cuando siete de cada diez chilenos rechaza al gobierno, lo mismo que a las dos coaliciones políticas tradicionales, de acuerdo a las últimas encuestas, lo que corresponde es convocar a un referéndum que dirima esta demanda”.
“El debate sobre los cambios que requiere el sistema educacional debe zanjarse a través de un plebiscito, donde participe la mayoría de los chilenos que se manifiesta a favor de este movimiento”, afirmó este martes el presidente del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami.
Esto, tras conocer la propuesta que el ministerio de Educación, Felipe Bulnes, presentó a los universitarios y secundarios, como un pacto que permita deponer las tomas y paros que se extienden desde mayo en los establecimientos educativos, como exigencia para una educación de calidad.
“Cuando siete de cada diez chilenos rechaza al gobierno, lo mismo que a las dos coaliciones políticas tradicionales, de acuerdo a las últimas encuestas, lo que corresponde es convocar a un referéndum que dirima esta demanda por mejor educación”, aseguró el ex diputado, quien reaccionó desde México, hasta donde llegó invitado por la Fundación Ethos, organización que está estudiando nuevos métodos para medir la pobreza en el mundo.
Enríquez-Ominami reiteró que nuestro país cambió, como lo han demostrado los últimos movimientos ciudadanos y sociales, por lo que es imposible que el tradicional duopolio político formado por la Concertación y la Alianza resuelva el conflicto, aunque reconoció que “lo mejor es esperar la respuesta que los actores de este movimiento le entregarán a las autoridades este viernes”.
