La manifestación de los trabajadores por cambios en el sistema económico y político tuvo una partida fuertemente rechazada por el Gobierno el miércoles.
Unas 300 personas concurrieron la noche de este jueves hasta el sector de Plaza Italia para participar de un nuevo caceroleo esta vez como cierre del paro de 48 horas convocado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para este 24 y 25 de agosto.
La manifestación de los trabajadores por cambios en el sistema económico y político tuvo una partida fuertemente rechazada por el Gobierno el miércoles con una serie de barricadas que impedían el normal desplazamiento del transporte público en la Región Metropolitana, retrasando la llegada de los santiaguinos a sus trabajos en la mañana.
Por la noche hubo enfrentamientos entre manifestantes y carabineros en varias comunas de la capital, principalmente en la periferia.
Para hoy las organizaciones que adhirieron a la protesta convocaron a cuatro marchas que desembocaron en la Alameda con Cumming y aunque hubo algunas escaramuzas, la protesta fue rotulada de pacífica.
El ruido de las cacerolas también se hizo sentir esta noche en Peñalolén, en sectores de Maipú, La Florida y Puente Alto y en la Plaza Ñuñoa como se ha hecho tradicional. A lo largo del país en las principales ciudades estudiantes y sus familias replicaron la manifestación.
