También pidió a los alumnos facilitar la reanundación de clases y «seguir avanzando en el desarrollo de nuestras actividades académicas del segundo semestre 2011, de modo de finalizarlo el 15 de marzo de 2012, considerando las situaciones propias de cada carrera y asegurando la calidad del proceso formativo».
Un llamado a los estudiantes a reanudar las clases, a terminar la toma de su casa central y a privilegiar el diálogo y el entendimiento formuló este viernes el Consejo Universitario de la Universidad de Chile, que al mismo tiempo reafirmó su “compromiso con la educación pública, la que ha sido postergada y deteriorada por un modelo educativo que requiere un cambio radical”.
A través de una declaración pública de 10 puntos, la instancia encabezada por el rector Víctor Pérez manifestó que es precisamente ese compromiso el que se ha manifestado con “la participación activa de la comunidad universitaria, durante el desarrollo del movimiento social liderado por nuestros estudiantes”.
“Si bien al interior de nuestra universidad, se han manifestado diferentes expresiones sobre este proceso, producto de la diversidad valorativa y disciplinaria que la caracteriza, todas y todos, estamos unidos en torno a sus objetivos estratégicos; en la preservación de una educación pública de calidad y equitativa, y de la Universidad de Chile como referente intelectual de la Nación”, sostiene el documento en alusión a los fundamentos de la movilización estudiantil.
Sin embargo, el Consejo considera que es necesario “seguir avanzando en el desarrollo de nuestras actividades académicas del segundo semestre 2011, de modo de finalizarlo el 15 de marzo de 2012, considerando las situaciones propias de cada carrera y asegurando la calidad del proceso formativo”.
Lo anterior, sostiene, para reafirmar lo acordado en el Consejo Universitario del 19 de agosto de este año, “en el sentido de compatibilizar una movilización activa de nuestra comunidad con las actividades docentes”.
Y por eso solicita a los estudiantes “reevaluar a la brevedad su posición respecto de la reanudación de las actividades docentes, por la importancia que ella representa para su propia formación y para la Universidad”.
También acordó “apoyar, participar y dar facilidades para la realización de los claustros de las comunidades universitarias que está realizando el Senado Universitario, y que buscan generar estrategias comunes para abordar los desafíos actuales y futuros de la educación pública”.
Asimismo, rechazó la toma de facultades y escuelas “y otras medidas de fuerza, pues contradicen el espíritu, los valores y la convivencia universitaria”. Asimismo, instó a los alumnos movilizados a “terminar con la ocupación de la Casa Central de nuestra Universidad, símbolo institucional e ícono de la educación pública”.
Finalmente, la declaración fechada este viernes 4 acordó reafirmar que “a través del diálogo y el entendimiento, podremos fortalecer tanto a nuestra Universidad como al movimiento social por la educación del cual forma parte”.
