“Existen daños menores en el edificio como grafitis en los muros, algunas chapas quebradas y basura acumulada. Fuera de eso no hay ningún otro daño. Los universitarios cumplieron y no ocuparon el patio Andrés Bello y las oficinas de Rectoría no fueron tocadas», detalló la autoridad.
Luego de que la Casa Central de la Universidad de Chile fuera entregada por parte de los estudiantes, el rector Víctor Pérez encabezó un recorrido por las dependencias para constatar el estado del inmueble, el cual resultó con daños menores.
«El hecho de que hoy nos encontremos acá, con una Casa Central en estas condiciones, con daños leves, es el resultado del diálogo y la razón que caracteriza a esta comunidad universitaria», expresó al mismo tiempo que manifestó su orgullo porque la casa de estudios haya sido reacreditada institucionalmente por siete años.
Acompañado por el vicerrector de Asuntos Académicos Patricio Aceituno, el contralor interno Antonio Zapata, el rector Pérez calificó como «una feliz coincidencia» el hecho de que el mismo día en que se oficializó la entrega del edificio, recibió la notificación de la Comisión Nacional de Acreditación de que la universidad había sido acreditada institucionalmente nuevamente, en todas las áreas (docencia de pregrado, docencia de postgrado, investigación, gestión institucional y vinculación con el medio) y por el periodo máximo.
«Es una linda forma de terminar el año, tenemos la Casa Central abierta a la comunidad y la Acreditación. Esta Universidad históricamente se la ha jugado por el país, realizando investigación, entregando conocimiento, somos además la primera Universidad del país en todos los rankings. Este 2011 también nos la jugamos por instalar la importancia de una Educación Pública de calidad.»
Manifestando su rechazo a cualquier acción de toma «porque éstas violentan la convivencia universitaria y restringen el acceso de una comunidad», el rector comentó que tras recibir el informe del Contralor y recorrer personalmente la Casa Central se puede constatar «que existen daños menores en el edificio como grafitis en los muros, algunas chapas quebradas y basura acumulada. Fuera de eso no hay ningún otro daño. Los universitarios cumplieron y no ocuparon el patio Andrés Bello y las oficinas de Rectoría no fueron tocadas».
«No hubo extravío de colecciones patrimoniales», informó el rector tras su recorrido por los diferentes espacios de Casa Central. Al respecto detalló: «Todo lo concerniente al Archivo Central Andrés Bello está intacto. Nadie entró durante la toma y eso lo detectó el Contralor Interno. Ahí se resguardan las Caracolas de Neruda y otros objetos patrimoniales», mencionó la autoridad académica sobre el estado de los bienes que ahí se conservan.
Lo mismo, explicó, respecto a las oficinas de la Dirección Jurídica, a las cuales no ingresaron los estudiantes.
«Desde el primer día le manifestamos a la FECh la necesidad de entregar la Casa Central, pero el desalojo no nos parecía la vía correcta», añadió el Rector relevando que «la Universidad es el espacio del diálogo, la razón y la conversación. Muchos establecimientos del país durante los últimos meses estuvieron totalmente tomados y toda las veces que se hizo entrar a la fuerza pública resultó contraproducente porque radicalizó las posiciones y los edificios fueron re-tomados».
«No creo en responder a una acción de violencia con otra acción de violencia, eso deja secuelas en la convivencia universitaria», recalcó agregando que «el hecho de que hoy nos encontremos acá, con una Casa Central en estas condiciones, con daños menores, es el resultado del diálogo».
