El ministro de Economía confía en que en el próximo trámite legislativo se perfeccionará esa materia resistida por pescadores artesanales, que aseguran que beneficiará a las denominadas «siete familias», y destacó que los diputados le dieran el visto bueno a gran parte del articulado.
En una larga y compleja votación, la Sala de la Cámara de Diputados aprobó y despachó al Senado gran parte del proyecto que modifica la Ley General de Pesca.
El ministro de Economía, Pablo Longueira, manifestó que le alegraba enormemente la aprobación en general y por una amplia mayoría, del proyecto, destacando que esta iniciativa cambia toda la institucionalidad vigente, creándose 11 comités científicos-técnicos, que eran parte de los artículos que requerían de un mayor quórum para su aprobación.
El ministro destacó además que se salvaron todas las normas generales, tanto las de quórum calificado y constitucional, además de las de mayoría simples, aprobando la entrega de la primera milla a los pescadores artesanales, el posicionador satelital y las certificaciones.
Aclaró también que se deben perfeccionar materias referidas a las licencias de pesca y se rechazaron las licitaciones a las cuotas de la pesca industrial, las que anunció, serán repuestas en el Senado.
«Con mucha alegría podemos decir que al parecer la ley no era tan mala, porque se consiguieron todos los votos para todas aquellas materias que son muy importantes para que tengamos una pesca sustentable en Chile, y cambiemos radicalmente la mirada que tenemos de este sector», dijo Longueira.
El diputado del Partido Socialista (PS) Marcelo Díaz, en cambio, manifestó que «esta ley no protege ni promueve la pesca artesanal y lo que hace es consolidar la propiedad de un conjunto de siete familias sobre los recursos de la inmensa mayoría de los chilenos».
El parlamentario agregó que la prueba más evidente de cómo esta ley privatiza el mar, «es cómo se votó en la Sala de la Cámara de Diputados una indicación que era muy simple, que decía que los recursos pesqueros nos pertenecían a todos los chilenos, esa propuesta fue rechazada por 50 diputados y por la vía de artilugio que fue declararla de quórum calificado, se impidió que el artículo 1ª de la Ley de Pesca ratificara lo que nos parece evidente: los recursos pesqueros nos pertenecen a todos los chilenos».
