El secretario de Estado justificó la semana pasada el uso de armamento por parte de los agricultores en la región de La Araucanía.
«Uno puede pedir lo que quiera, pero no corresponde en absoluto pedir perdón», sostuvo el ministro de Agricultura, Luis Mayol, respecto a la demanda planteada ayer como conclusión de la ‘Cumbre Mapuche’ en cuanto a que el Estado y el gobierno chileno deben pedir perdón por el daño histórico a esa etnia.
«Ningún Presidente de Chile, ninguna autoridad, debe pedir perdón si no es una reflexión mucho más profunda. Estamos recién haciendo un análisis de ciertas circunstancias de hechos que ocurrieron», sostuvo el secretario de Estado en Canal 24 Horas.
«El pueblo mapuche es un pueblo de paz que tiene las misma aspiraciones que tenemos todos los chilenos. Lo que tenemos que hacer es crear y generar oportunidades para que este pueblo se desarrolle y pueda salir de la pobreza, todo ello respetando su riqueza cultural», recalcó Mayol.
La semana pasada, el titular de Agricultura hizo hincapié en que «nuestro estado de derecho considera al igual que todas las legislaciones del mundo la legítima defensa», en relación al uso de armamento por parte de los agricultores en la región de La Araucanía.
En ese sentido, Mayol reparó en que «tienen que emplearse medios equivalentes cuando una persona ve amenazada su vida, la de su familia o sus bienes. Usted está con su familia en su casa tranquilamente y llegan 10 encapuchados armados. Es consustancial al ser humano defenderse (…) cualquier persona defiende a su familia, defiende a sus bienes con lo que tenga a mano».
Recalcando que «ya a nadie le cabe duda que son acciones terroristas y no es delincuencia común. El pueblo mapuche yo lo conozco muy bien, lo he recorrido completo de hace muchos años y es un pueblo totalmente pacífico». Asimismo, dijo que las personas que han cometido los ataques incendiarios son un «grupo muy reducido, ya que el pueblo mapuche quiere surgir, quiere desarrollarse igual que todos los chilenos, obviamente manteniendo su cultura que tenemos que respetarla todos».
