“Una investigación profunda y rigurosa que garantice que vamos a poder llegar hasta el final de las consecuencias y de la realidad de aquello que ocurrió”, precisó Figueroa, explicando que el sindicalista muerto estaba llevando una negociación con la empresa en defensa de los derechos de los trabajadores y había denunciado malas prácticas antisindicales.
La presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, consideró como “insuficiente lo que hasta ahora se ha planteado” respecto a que sería una bala perdida sería la causante del fallecimiento del presidente del sindicato Nº 1 de la empresa de ingeniería eléctrica Azeta, y presidente de la Federación de Trabajadores de la compañía, Juan Pablo Jiménez, quien apareció muerto el jueves pasado en su lugar de trabajo.
Al respecto, la líder de la multisindical dijo a radio ADN que “hay que hacer una investigación profunda”.
“Una investigación profunda y rigurosa que garantice que vamos a poder llegar hasta el final de las consecuencias y de la realidad de aquello que ocurrió”, precisó Figueroa, explicando que el sindicalista muerto estaba llevando una negociación con la empresa en defensa de los derechos de los trabajadores y había denunciado malas prácticas antisindicales.
“Hay que considerar a la hora de poder llevar una investigación lo más profunda y prolija respecto de la situación el contexto en la que se da”, argumentó.
Para la timonel de la CUT, es necesario “entender lo que implica y la gravedad que tiene para el país que hoy día se muera un dirigente sindical (…) Este no es un tema solo de la CUT, todos los trabajadores de Chile estamos de luto», afirmando que “no quisiéramos que en el caso de Chile empiece a sembrar la impunidad respecto a la pérdida de vida de nuestros sindicales».
Figueroa dijo que esperaba que este lunes o mañana martes pueda ser recibida por el Fiscal Nacional para solicitar que se disponga un fiscal especial para investigar la muerte del sindicalista.
