Se trata de dos avisos firmados por la «Fundación Presidente Pinochet» y por el «Directorio de la Fundación Presidente Pinochet» alusivas al deceso de la dirigente conservadora, fallecida el pasado lunes a los 87 años.
Los seguidores del fallecido dictador Augusto Pinochet expresaron este miércoles en el obituario de El Mercurio sus condolencias por la muerte de la ex primera ministra británica Margaret Thatcher «a su familia, el Gobierno y a todo el pueblo británico».
Se trata de dos avisos firmados por la «Fundación Presidente Pinochet» y por el «Directorio de la Fundación Presidente Pinochet» alusivas al deceso de la dirigente conservadora, fallecida el pasado lunes a los 87 años.
Thatcher y Pinochet mantuvieron una relación cordial desde que la dictadura militar prestó apoyo de inteligencia e información a las tropas inglesas en la guerra de las Islas Malvinas, en 1982, que la primera ministra reconoció públicamente.
Mientras Pinochet permaneció arrestado en Londres, entre octubre de 1998 y marzo de 2000, fue visitado en la casa en que cumplía la medida por Thatcher, que también lo ensalzó por haber «devuelto la democracia» a Chile y por el sistema económico neoliberal implantado por su régimen.
«Ha fallecido en Londres la notable Estadista y Ex Primer Ministro del Reino Unido, señora MARGARET THATCHER (Q.E.P.D.), quien fuera una gran líder mundial con una participación decisiva en la caída del muro de Berlín y el término de la Guerra Fría», señala la primera nota de la «Fundación Presidente Pinochet» publicada en El Mercurio.
«Vayan nuestras condolencias a su familia, al Gobierno y a todo el pueblo Británico», añade el texto.
La otra nota, del directorio Fundación, señala que «Hoy recordamos con gran pesar el sensible fallecimiento de la Ex Primer Ministro del Reino Unido, señora MARGARET THATCHER (Q.E.P.D.), quien con mucha fortaleza, propia de su personalidad, defendió la soberanía jurisdiccional de Chile en momentos muy difíciles de nuestra historia reciente».
«Nuestro afecto invariable a toda su familia, al Gobierno y al pueblo Británico», concluye.
