El abogado sostiene que tanto la ex mandataria como quienes la rodean con muy poco se han apropiado de la pauta diaria, “relegando al gobierno y a todos los otros candidatos que pretenden disputar esta apabullante supremacía, a la simple categoría de teloneros, cuya presencia sólo pareciera justificarse en la medida en que accidentalmente complementan una obra que a ratos parece un monólogo”.
El abogado Jorge Navarrete realizó una dura crítica a la prensa, señalando que a ésta le hace falta una actitud más incisiva con la candidata del PS-PPD, Michelle Bachelet, acusando de paso al gremio de hacer un “periodismo de teletipo”.
El columnista y miembro del Comando de Orrego (DC) señala en La Tercera que actualmente parece que no hubiese otro tema que el de la campaña de Bachelet con excepción de algunas informaciones como la acusación constitucional de Harald Beyer o la masiva marcha estudiantil del pasado jueves.
Sin embargo, reconoce el adecuado despliegue de las apariciones públicas de la ex mandataria, las que “mediante una deliberada planificación, han prolongado la novedad que significó romper con su largo silencio. De esta manera, sus afirmaciones son objeto de todo tipo de exégesis, por aliados y adversarios, quienes contribuyen a mantener y consolidar su inmejorable posición”.
Sostiene que “el abuso de las generalizaciones ha devenido en un efecto muy deseado del discurso público, y que consiste en trasladar la final comprensión del mensaje político oyente, por la vía de que éste completa o interpreta sus dichos, según lo que realmente quiere escuchar”.
Explica que la empatía y conexión con los ciudadanos que tiene la ex mandataria le “imprime una profundidad a ciertas reflexiones, las que igualmente pronunciadas por sus adversarios difícilmente podrían escapar al lugar común”.
Navarrete agrega que tanto Bachelet como quienes la rodean con muy poco se han apropiado de la pauta diaria, “relegando al gobierno y a todos los otros candidatos que pretenden disputar esta apabullante supremacía, a la simple categoría de teloneros, cuya presencia sólo pareciera justificarse en la medida en que accidentalmente complementan una obra que a ratos parece un monólogo”.
Sin embargo, el abogado no sólo le da el crédito a la ex Presidenta, sino que apunta sus dardos de responsabilidad a los otros candidatos presidenciales, quienes han mostrado una impericia a la hora de hacer valer sus planteamientos.
“No es excusa que quienes lideran las encuestas rehúyan el debate o se nieguen a confrontar sus opiniones. La era de la digitalización otorga valiosas oportunidades para, con creatividad y atrevimiento, establecer canales de contacto y diálogo directo con los ciudadanos, los que complementados con un mayor esfuerzo de despliegue territorial, pueden contribuir a visibilizar proyectos, liderazgos e ideas, que en algo interpelen al discurso dominante”, argumenta.
Otra responsabilidad, según Navarrete, cae en los medios de comunicación, afirmando que “descartada cualquier connivencia o teoría conspirativa entre la prensa tradicional y lo que representa políticamente Bachelet, la explicación para la flagrante parsimonia, en ausencia de cualquier actitud más incisiva o básica inquietud profesional, descansa sólo en la desidia y la flojera de un gremio que parece haberse acostumbrado al periodismo de teletipo”.
