Actualmente la salud pública como la privada son de copago, y las operaciones y tratamientos de enfermedades como el cáncer, la esclerosis y otras graves y crónicas pueden ascender varios miles de dólares, por lo que para costear esos tratamientos, muchas personas, además de solicitar créditos bancarios, recurren a la ayuda de familiares y amigos y organizan rifas, espectáculos u otras iniciativas lúdicas para recaudar fondos.
Cientos de personas, en su mayoría enfermos crónicos y graves, marcharon este sábado por las calles de Santiago como una forma de plantear el problema que enfrentan con el poco acceso a remedios, llamando a crear un fondo nacional para medicamentos.
El evento, organizado por el periodista Ricarte Soto, quien padece de cáncer al pulmón, fue todo un éxito, debido a que llegó una gran cantidad de personas enfermas y sanas, y diversas organizaciones y fundaciones hasta el Parque Forestal desde todas partes de la capital.
Unas 5.000 personas, algunas de ellas en sillas de ruedas, se sumaron a esta convocatoria, promovida a través de medios de comunicación y redes sociales, sin intervención de partidos o sindicatos.
También se hicieron presentes varias figuras televisivas y del espectáculo local como Paulina Nin, quien sufre del mal de Crohn y la periodista Cecilia Serrano, quien sufre de esclerosis múltiple.
Tras el éxito de la convocatoria, Soto dijo que «realmente estoy emocionado por toda esta gente. Hoy realmente se ha demostrado que aquí hay un gran problema. Solucionemos el problema de lo medicamentos».
El objetivo de esta manifestación, según los organizadores, es «llamar la atención sobre el hecho que, la mayoría de las personas que padecen de enfermedades graves, crónicas con todas sus variantes como las degenerativas, y aquellas denominadas como ‘raras’, no tienen acceso a los medicamentos necesarios y esto constituye una desigualdad insoportable».
Otro de los que estuvo presente en la marcha fue el miembro del equipo de TVN, José Miguel Viñuela, quien lamentó la ausencia de autoridades en la manifestación y dijo que el acto refleja que “el Chile de hoy, el Chile que se moviliza”.
Además, crítico el poco acceso a medicamentos de parte de los pacientes, los cuales son en algunos casos excesivamente caros.
“Se entienda de una vez por todas que en Chile los remedios no pueden costar siete veces más de lo que cuestan en un país desarrollado (…) aquí el que no tiene una buena previsión se muere”, sostuvo.
Uno de los objetivos de la marcha es la creación de un Fondo Nacional de Medicamentos donde existan aportes tanto del Estado, como de los empleadores y de los propios trabajadores.
En Chile, tanto la sanidad pública como la privada son de copago, y las operaciones y tratamientos de enfermedades como el cáncer, la esclerosis y otras graves y crónicas pueden ascender varios miles de dólares.
Para costear esos tratamientos, muchas personas, además de solicitar créditos bancarios, recurren a la ayuda de familiares y amigos y organizan rifas, espectáculos u otras iniciativas lúdicas para recaudar fondos.
El sistema de salud actual, igual que el educativo, fueron desarrollados durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
La movilización también se realizó simultáneamente en varias ciudades del país.
