Los reiterados incrementos en los precios de la bencina y el petróleo afectan especialmente al transporte de pasajeros y carga, los cuales en los últimos 21 días han registrado aumentos totales de $30,2 por litro sin ninguna subvención.
El gremio autobusero está preocupado por las reiteradas alzas de los precios de los combustibles, afirmando que en los últimos 21 días se han registrado aumentos totales de $30,2 por litro sin ninguna subvención.
Para el presidente del gremio, Marcos Carter, el sector enfrenta un escenario complejo en materia de costos operacionales, debido a que “estamos pagando cifras exorbitantes por el mismo combustible que consumíamos a principios de año, y eso hay que solventarlo tanto en temporada alta como baja”.
Actualmente, el sector consume alrededor de 60 millones de litros de petróleo al mes y en los últimos 21 días el diésel ha subido $30.2, ante lo cual Carter sostuvo que “sólo la semana del 18 de julio aumentamos nuestros costos en 231 millones de pesos; a eso sumamos 90 millones más del alza del 25 de julio; y hoy 1 de agosto aumentamos $132 millones adicionales a lo que ya invertimos mensualmente en combustible”.
El dirigente gremial también aprovechó de criticar el Sipco, al señalar que “no es una solución para este sector, más bien es un mecanismo ineficaz con respecto a una banda moderadora de los precios que no permite igualdad de condiciones frente a otros sectores que no pagan el mismo impuesto a los combustibles como las eléctricas, las mineras, etc. Que aparecen como sectores privilegiados y el Gobierno no hace nada al respecto, a pesar de nuestras constantes presentaciones”.
“Hoy una prueba de ello, es que el Sipco sólo subvencionó en parte a la bencina, que nuevamente tiene un alza considerable, pero en el caso del diésel se absorbió total el alza, completamente”, reclamó.
Por último, precisó que en las últimas tres semanas, el precio del petróleo ha incrementado su valor para el sector 453 millones de pesos.
