El parlamentario PPD afirmó que el anuncio de Piñera «es el primer paso para que estos criminales que provocaron tanto dolor a miles de chilenos comiencen a cumplir sus condenas en las mismas condiciones que cualquier ciudadano».
El diputado PPD y miembro de la Comisión de DD.HH. de la Cámara Baja, Tucapel Jiménez, celebró la decisión del Presidente Sebastián Piñera de cerrar el Penal Cordillera, centro que donde permanecen recluidos diez condenados por crímenes de lesa humanidad cometidos en dictadura, entre ellos, el ex director de la DINA, Manuel Contreras.
«Celebro con mucho entusiasmo que se termine con las comodidades y privilegios que reciben estas personas, y valoro aún más que la decisión provenga de un Presidente que representa a un sector de la derecha», aseguró Jiménez. Sin embargo, el parlamentario criticó que los internos vayan a ser trasladados al penal Punta Peuco, otro recinto de militares condenados por violaciones a Derechos Humanos.
El parlamentario planteó que «si el argumento para cerrar el Penal Cordillera es la igualdad ante la ley, deberíamos en forma inmediata cerrar Punta Peuco, que también mantiene privilegios para los internos».
«El cierre del Penal Cordillera es el primer paso para que estos criminales que provocaron tanto dolor a miles de chilenos comiencen a cumplir sus condenas en las mismas condiciones que cualquier ciudadano, dejando en claro que las personas condenadas por delitos simples y graves deben perder la libertad y no la dignidad», concluyó Jiménez.
