Dos pediatras, de Hospital Calvo Mackenna y la clínica de la U. Mayor señalaron que el anuncio del Minsal de optar por una nueva inmunización que puede aplicarse desde los 12 meses y no en dos dosis desde los nueve, como ocurre hasta ahora, tiene que ver más con un tema de costos y no en mayores beneficios para la población.
Luego que el subsecretario de Salud, Jorge Díaz, informara que el gobierno cambió la vacuna para prevenir la meningitis W135, en el marco de las modificaciones al Programa Nacional de Inmunizaciones, varios especialistas manifestaron sus reparos frente a la medida, ya que algunos de ellos consideran que se privilegiaron temas de costo en desmedro de los beneficios para la población.
Cuando hace un año comenzó el proceso de inmunización contra la enfermedad, que suma 74 casos (51 de Santiago) y ha cobrado la vida de 17 personas, se dispuso que los bebés entre nueve y 12 meses recibieran dos inoculaciones. Pero a partir de 2014 los bebés recibirán sólo una dosis, al cumplir el año de vida.
vamos a modificar el sistema, pondremos una dosis de vacuna para que las mamás no tengan que venir al consultorio en dos oportunidades; es un vacuna nueva que nos permite tener los mismos niveles de inmunidad”, dijo Díaz.
Pero el médico José Cofré, pediatra del Hospital Calvo Mackena, considera que se trata de «un argumento muy superficial, pues en el programa hay vacunas que tienen varias dosis y las madres cumplen en forma bastante disciplinada y con respuesta positiva de la comunidad sobre el 90 por ciento, así que, ese argumento es absolutamente no válido”.
A su juicio, se trata de «una decisión que está basada en un criterio de beneficio versus costo, porque la enfermedad meningocócica afecta principalmente a los primeros años de edad y uno quisiera ocupar una vacuna que esté disponible para ocupar en el primer año de edad. Incluso hoy en el medio existen vacunas para ocupar a partir de los dos meses y otra a partir de los nueve meses».
Cofré indicó que «el ministerio resolvió vacunar a partir del año, pues usa una sola dosis, las otras ocupan cuatro dosis y ahí es mayor el costo, entonces ellos probablemente sacaron cuentas de cuantos casos iban a prevenir si vacunaban a partir de los 2 meses, o a partir de los 9 ó 12 meses y poniendo a la balanza lo que le costaba cada esquema vs cuantos casos podrían prevenirse dentro de una enfermedad que obviamente es de baja incidencia, optaron por el esquema menos costoso”.
Por su parte, el pediatra infectólogo del Hospital de la Universidad Mayor, Leonardo Maggi, señaló que con la puesta en marcha de esta inmunización de dosis única, los menores quedan más expuestos a contraer la enfermedad durante los primeros 12 meses de vida. Para el experto, “estamos asumiendo que vamos a tener menor protección, ya que no la tendrán desde los 9 meses. Por lo mismo, va a existir un mayor número de menores que quedará expuesto a contraer la W-135”.
Maggi sostiene que cuando el Minsal argumenta que esta modificación del Programa Nacional de Inmunizaciones para que las madres de los menores concurran sólo una vez al consultorio, es un juicio que apunta a subsanar un problema logístico y operativo más que a prevenir el contagio de los infantes. “Se puede pensar que al evitar citar a los menores a control para que se vacunen, éstos se exponen menos a lugares donde pueden contraer la meningitis. Yo creo que lo mejor es vacunarlos que exponerlos menos. Para mí esto es mucho más eficiente y correcto”, indicó el infectólogo.
Finalmente, advirtió que si durante un tiempo se deja de vacunar a un sector de la población (entre 9 y 12 meses), existe una alta probabilidad de que este pueda contraer la W – 135, quedando desprotegidos frente a esta letal bacteria. “Mi pensamiento técnico es que si yo dejo de vacunar a un grupo, voy a tener si o si algunos casos de W – 135”, argumentó el pediatra.
