En analista de Defensa consideró «sorprendente» que el Presidente Sebastián Piñera no se limitara a la quina de los generales con mayor antigüedad a la hora de designar a Humberto Oviedo como nuevo jefe castrense.
Como «sorprendente» calificó este miércoles el analista de defensa Raúl Sohr la decisión del Presidente Sebastián Piñera de no elegir al sucesor de general Juan Miguel Fuente-Alba entre las cinco mayores antigüedades de la institución, optando en cambio por el general Humberto Oviedo, que ocupa actualmente el noveno lugar en el Alto Mando, lo que que significa un verdadero descabezamiento de la plana mayor.
En declaraciones a Radio Cooperativa, Sohr dijo que «es sorprendente porque estaba establecido, de una manera u otra, que se iba hasta la quinta antigüedad y que el Presidente escogía entre las cinco primeras antigüedades. Por lo tanto, esto marca un cambio».
A su juicio, esta situación podría llevar a una revisión del sistema, para que el nombramiento de un jefe castrense, tal como ocurre hoy día, no signifique el paso a retiro de todos los otros generales que le anteceden en antigüedad.
«Puede llevar o podría llevar a una revisión del tema de las antigüedades, porque el hecho que tengan que pasar a retiro una serie de generales que, de otra manera, podrían seguir en el servicio activo, es algo que en muchos otros ejércitos no se da», sostuvo.
Al respecto precisó que ello posibilitaría que «personas de menor antigüedad pueden asumir cargos que superan a las mayores antigüedades, sin que estos últimos tengan que salir a retiro».
