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Lily Pérez renuncia a RN en antesala del Consejo Nacional y continúa desangramiento en la tienda de Antonio Varas Llegó a primera hora de hoy a las oficinas del Servel para dar término a militancia

Lily Pérez renuncia a RN en antesala del Consejo Nacional y continúa desangramiento en la tienda de Antonio Varas

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
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Con su dimisión, la legisladora le dará finalmente al movimiento Amplitud un liderazgo fuerte para comenzar a concretar los proyectos políticos que tienen a mediano y largo plazo, y atrás suyo deja un partido sumido en una profunda crisis en el marco de la cual cada vez surgen más voces que piden la cabeza de su timonel, Carlos Larraín.


Apenas este jueves abrió sus puertas el Servicio Electoral, la ex senadora de Renovación Nacional Lily Pérez presentó su renuncia formal a la colectividad que integró desde su juventud y de la que incluso llegó a ser secretaria general.

La parlamentaria, que según comenta su entorno se sumará al nuevo movimiento Amplitud, formado por los diputados Karla Rubilar, Pedro Browne y Joaquín Godoy, no ha hecho hasta el momento ninguna gestión ante la directiva de RN, donde algunos de sus representantes han conocido de oídas que hoy sería el día en que la senadora formalizaría su salida de la colectividad.

En el círculo más cercano de la senadora señalan que sólo un reducido grupo de personas cercanas a ella conocía de su boca esta información que fue mantenida en el más estricto hermetismo. Sin embargo, trascendió que la renunciada parlamentaria comunicará oficialmente su renuncia a la prensa a las 14:30 horas en la sede del Congreso en Santiago.

Con su dimisión, Lily Pérez le da finalmente al movimiento Amplitud un liderazgo fuerte para comenzar a concretar los proyectos políticos que tienen a mediano y largo plazo y atrás suyo deja un partido sumido en una profunda crisis en el marco de la cual cada vez surgen más voces que piden la cabeza de su timonel, Carlos Larraín, y adelantar el cambio de directiva, de manera de intentar superar el difícil trance por el que atraviesan en la casona de Antonio Varas.

Quienes aún se mantienen en el partido y piden la salida de Larraín, lo hacen porque estiman que es la forma de evitar el lento desangramiento que tiene al partido sumido en su mayor crisis después del denominado Temucazo.

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