Aseguró que Hernán Doren «no tiene ningún poder de mando» en el sector
Claudio Santander dijo en entrevista con El Mercurio que la industria es «muy insensible a los cambios sociales» y acusó que “esto (el gremio) se maneja de acuerdo con las decisiones de Banmédica o Consalud, el resto somos arroz graneado”. Asimismo, si bien antes apoyaba la idea de reunirse como industria, hoy señala que la idea no parece tan viable, pues «si al Coloso A no le convienen, quedan congeladas las soluciones».
Se agudiza el conflicto al interior de la industria de las Isapres y el gremio da señales de estar en condición crítica. A la salida de Colmena a fines de 2013, con duros cuestionamientos al manejo que tienen de la asociación Banmédica y Consalud, esta vez se sumó Masvida.
“Esto se maneja de acuerdo con las decisiones de Banmédica o Consalud, el resto somos arroz graneado”, dijo a El Mercurio el presidente de Masvida, Claudio Santander, la isapre originaria de Concepción que ha tomado relevancia a nivel nacional por haber subido sus precios sólo una vez en los últimos seis años.
Santander afirmó que antes apoyaba la idea de reunirse como industria y tomar decisiones, pero que la idea ya no parece tan viable, pues “si al Coloso A no le convienen, quedan congeladas las soluciones, entonces uno dice por eso se salió Colmena de la asociación”.
El directivo afirmó además que «los ejecutivos de Isapres son muy insensibles a los cambios sociales» y criticó la labor de Hernán Doren, titular del gremio, de quien cuestionó su liderazgo. “No tiene ningún poder de mando”, dijo.
De paso se propuso para liderar el gremio, destacando que Masvida “transparenta el sistema, porque somos una isapre que ha prestigiado al sistema, que además tiene un pensamiento positivo, futurista y de cambio”.
En noviembre de 2013, Colmena se retiró de la asociación, criticando la conducción del gremio a través de una carta revelada el 23 de enero pasado.
En aquella oportunidad, el propio Santander deslizó una dura crítica a Colmena, asegurando que sus propuestas ya habían sido planteadas en el gremio y que Masvida “es una empresa que está para quedarse, con visión de largo plazo, con una visión muy social del mercado y que por siete años no ha reajustado sus planes, tiene una rentabilidad que estima satisfactoria, que es del 50% del promedio del sistema y no es una empresa de inversionistas que vienen para hacer ‘la pasada’, como ocurre con algunas que buscan la máxima rentabilidad económica para sus accionistas en el más breve plazo y luego se venden a otros”.
