El ex Presidente sostuvo que las reformas impulsadas por el Ejecutivo «tienen en su génesis y ADN una concepción ideológica».
El ministro secretario general de Gobierno, Álvaro Elizalde, salió al paso de las críticas formuladas por el ex Presidente Sebastián Piñera en una columna que se encuentra en su sitio web Sebastianpinera.cl, donde señala que las reformas impulsadas por el Ejecutivo «tienen en su génesis y ADN una concepción ideológica del tipo de sociedad que los sectores de izquierda, dominantes en el actual gobierno, parecen querer imponer».
El ex mandatario agrega: «Las consecuencias de este giro a la izquierda ya las estamos experimentando: pérdida de capacidad de crecimiento y creación de empleos, estancamiento en los salarios; debilitamiento de la capacidad de innovación y emprendimiento, y retrocesos en materia de inversión y productividad». Y se refiere a la Reforma Tributaria asegurando que aún no se ha «clarificado» el destino de los U$ 8.200 millones que la reforma pretende recaudar. De igual modo, tiene palabras para la iniciativa para establecer una nueva Constitución: «Apunta a incrementar el poder del Estado y debilitar las libertades y derechos de los ciudadanos».
Al respecto, el vocero de La Moneda respondió: «Si vamos a debatir respecto de valores, hagámoslo en serio. Nosotros como gobierno, representando el sentir de la gran mayoría de los chilenos, creemos que la educación es un derecho y no un bien de consumo. Por eso, a diferencia del gobierno anterior, vamos a resolver el problema que se ha estado postergado durante mucho tiempo: que la educación chilena no tiene la calidad que nuestros niños y jóvenes se merecen».
Consultado por el «giro a la izquierda» al que hace referencia Piñera, el secretario de Estado acota que «lo que existe es un giro ciudadano».
En cuanto a los dichos del ex mandatario sobre el proyecto de reforma constitucional, Elizalde afirma que se trata de una «crítica absurda», ya que «ni siquiera saben cuál es el contenido de una eventual nueva Constitución, que nosotros hemos señalado que va a ser una Constitución que va a emanar de la ciudadanía».
«No queremos polemizar, estamos por resolver los problemas que tienen los chilenos, y tenemos que hacernos cargo de la mala herencia recibida de la pasada administración», concluyó.
