El sociólogo se muestra contrario a la idea de efectuar un cambio de gabinete. «No veo por qué otras personas lo habrían de hacer mejor que las que están, y que apenas llevan seis meses. Quizás haya que ajustar el libreto, pero no cambiar a los actores», sostiene.
El sociólogo y lobbista Eugenio Tironi asegura que uno de los factores que está afectando al gobierno y explicaría los resultados de la encuesta Adimark –que señalan que por primera vez en este mandato Bachelet baja del 50% de aprobación– es el excesivo apego al programa de gobierno.
«Bastaría con que Bachelet se emancipe un poco de ese ‘deber ser’ que es el programa y se suelte un poco. En otras palabras, que siga su intuición», sostuvo en una entrevista publicada hoy en La Tercera.
Al ser consultado por si el sondeo es un indicio de que se necesita un ajuste en el equipo de gobierno, el ideólogo dice que «en absoluto». «Lo que ocurre es que el gobierno ha tenido que encarar las miserias de la gestión. Esto siempre es menos glamoroso que la proclamación de nuevas formas de gobernar, nuevos ciclos y cosas por el estilo. Pero un gobierno no puede huir de la gestión; y para hacerla bien necesita darles estabilidad a sus ministros», acota Tironi.
Para el ensayista, la raíz del problema está en una mezcla de cosas, «el invierno, las fallas del Metro, las alzas de precios, las perspectivas económicas; vale decir, los clásicos problemas de la vida ordinaria. Ellos estuvieron contenidos y, en cierto modo, sublimados cuando parecía que las reformas iban a salir por un tubo y resolver automáticamente todos los problemas. Pero como no fue así –como no puede ser así–, la gente empieza a inquietarse y a ponerse más desconfiada. Es natural».
Y deja en claro que «el problema no es de personas, es de libreto; es de cómo mantener el encanto de estar juntos después que ha pasado la pasión inicial. Bachelet sabe como nadie cómo hacerlo. Bastaría con que se emancipe un poco de ese “deber ser” que es el programa y se suelte un poco. En otras palabras, que siga su intuición».
Ante las voces empresariales que piden directamente la salida del ministro de Hacienda, Alberto Arenas, Tironi contesta: «Si la idea es combatir la incertidumbre y reforzar la confianza entre los agentes económicos no creo que haya nada menos apropiado que cambiar al ministro de Hacienda a seis meses de asumir y teniendo a su haber una reforma tributaria gigantesca alcanzada en tiempo récord y con un amplio respaldo político».
¿Sería muy dramático si sale?, le preguntan. El sociólogo responde: «Es que francamente no veo ningún motivo, salvo que alguna gente no lo encuentre simpático ni se lo encuentre en Zapallar».
