Aunque no tiene el apoyo de los otros ex líderes estudiantiles
El diputado habla del «fracaso» de la gestión ministerial, y añade que, a su juicio, el dilema es mantenerlo en su cargo o esperar el fracaso de una reforma «real». Es segunda vez que pide oficialmente un cambio en el Mineduc.
Gabriel Boric volvió a la carga contra Nicolás Eyzaguirrre, pidiendo que deje su cargo. El diputado de la Izquierda Autónoma escribió una carta, publicada por La Tercera, en la que expone cómo, a su juicio, el ministro de Educación no ha cumplido las expectativas que los grupos de interés vinculados a la educación tenían al comienzo cuando fue nombrado. Según Boric, los estudiantes se sienten «frustrados», los rectores «engañados» y los profesores «enfurecidos» y agrega que la incertidumbre ha hecho marchar a los padres contra la reforma.
«La salida que ofrece Eyzaguirre para salvar su gestión es un pacto bajo cuerdas con la Iglesia Católica. Más allá de criticar el pacto en sentido educacional, es un fracaso como estrategia política: no aumenta la legitimidad ni de Eyzaguirre ni de la reforma. Los ciudadanos ya no sienten como propia esta reforma», escribe el diputado del movimiento Izquierda Autónoma.
Para Boric existe el peligro de que «el fracaso de Eyzaguirre sea el fracaso de una real reforma educacional». El ex presidente de la Fech dice que la solución está en «construir entre el gobierno y la sociedad un amplio acuerdo social que permita ganar la batalla a los poderes fácticos».
El ex dirigente estudiantil y actual diputado alega que desde su colectividad le entregaron una propuesta al ministro, pero no han recibido respuesta. «Sin respuesta, nos hemos acercado a parlamentarios para plantearles la necesidad de enfocar en la educación pública y la construcción de un amplio acuerdo social los esfuerzos para salvar la reforma».
Por último, el diputado por Magallanes cree que el dilema es «optar entre Eyzaguirre o la reforma educacional que hizo posible la ciudadanía. Naturalmente hay avances que defender y aspectos positivos de los proyectos que no pueden ser abandonados, pero no constituyen el eje del problema ni aseguran salvar la situación política general de la reforma», concluyó.
Boric escribe esta carta diagnosticando el «fracaso» de Eyzaguirre días después de que identificara al ministro como «un obstáculo» para la reforma, junto con pedir su renuncia. En este punto marcó una distancia con Giorgio Jackson y Camila Vallejo, los otros gestores del movimiento estudiantil que están en el Congreso, quienes le expresaron su apoyo al ministro de Educación.
