Después del rechazo del Consejo de Ministros
La Dirección General de Aguas rechazó la petición de más del 50% de los permisos para usar el caudal de los ríos Pascua y Baker, los que según el dictamen serán destinados a conservación y desarrollo productivo.
El Ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, informó hoy que la Dirección General de Aguas, dependiente del MOP, resolvió no otorgar los derechos de agua sobre los ríos Pascua y Baker a los gestores del proyecto HydroAysén.
«Denegamos derechos de agua en el río Baker y en el río Pascua por razones de caudal ecológico y por el Plan de Desarrollo Regional. Ello, sin perjuicio del programa de desarrollo energético que se está haciendo en la región, con participación ciudadana», dijo Undurraga a El Mercurio.
Con esta decisión queda prácticamente sepultado el proyecto, que tenía previsto generar 2.750 MW de electricidad y contemplaba una inversión de US$10 mil millones. El dictamen es el paso siguiente al rechazo desde el Consejo de Ministros ocurrido en junio del año pasado.
Fuentes ligadas a la empresa, consignadas por El Mercurio, afirman que todavía no son notificados del dictamen pero quienes lo conocen estiman que esta decisión significa que el proyecto queda paralizado, aunque se podría reactivar en un futuro gobierno, que diseñe un plan energético para la región.
El dictamen consigna que «la DGA se ha formado la convicción de decretar reserva de caudales en esta zona de la cuenca del río Pascua, no solo desde la perspectiva de la preservación ecosistémica, sino también desde la perspectiva del desarrollo productivo regional, mediante el análisis de instrumentos como la Estrategia Regional de Desarrollo, el Plan Especial de Desarrollo de Zonas Extremas de la Región de Aysén, y otros».
El proyecto de generación hidroeléctrica es propiedad de Endesa controlada por Enersis, de la italiana Enel y Colbún de la familia Matte, con el 51% y 49%, respectivamente.
