Katherine Bischof trabajaba para el ex gerente general cuando se produjeron las visitas de los UDI Pablo Longueira, Pablo Zalaquett y Jovino Nova, el embajador DC Marcelo Rozas, el líder del PRO Marco Enríquez-Ominami y el ex senador Carlos Ominami.
Katherine Bischof, quien se desempeña como asistente de la presidencia y gerencia general de SQM, declaró como testigo el martes pasado ante el fiscal Pablo Norambuena, oportunidad en la que aseguró que fueron al menos seis los políticos que se reunieron con el ex gerente general de la empresa, Patricio Contesse, de quien fue secretaria.
Según informa este viernes el diario La Tercera, en el listado se cuentan el ex ministro de Economía y ex candidato presidencial Pablo Longueira, el ex senador Jovino Novoa y el ex alcalde de Santiago Pablo Zalaquett, todos ellos de la UDI.
También figuran el ex embajador de Chile en República Checa Marcelo Rozas (DC), el ex senador socialista Carlos Ominami y el ex candidato presidencial y líder del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami.
Bischof no fue interrogada solo por Norambuena, quien integra el equipo de fiscales que indaga los casos Penta y SQM, sino que también por un funcionario de la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI.
En su mayoría, estos personajes están vinculados con algunos emisores de boletas y facturas falsas a la minera no metálica controlada por Julio Ponce Lerou y que forman parte de la última denuncia por delito tributario que presentó el Servicio de Impuestos Internos ante el Ministerio Público.
En el caso de Longueira, su hijo José Tomás Longueira Brinkmann emitió boletas falsas por cuatro millones de pesos. También lo hicieron su ahijado Rubén Carvacho Sáez y su esposa, Carolina Andrea Chamorro Martínez. También aparece Patricio Lazcano, quien declaró haber boleteado para SQM por requerimiento de la fundación Chile Justo, creada por el ex ministro.
Y mientras Jovino Novoa está siendo investigado por las supuestas boletas falsas entregadas a Penta, Rozas aparece como el emisor de una boleta de 2,2 millones de pesos a Soquimich.
Por su parte, Zalaquett figura como el supuesto receptor de los dineros que consiguieron en Soquimich las empresas Reactor SPA y Asesorías Cristina Zúñiga Paredes EIRL a través de supuestas facturas falsas.
Enríquez-Ominami reconoció la cita con Contesse, pero asegura que fue para plantearle su posición sobre “la estatización del litio”.
