Senador dice que solo ha frenado «impulsos refundacionales propios del infantilismo»
El senador de la DC se ha caracterizado por hacer intervenciones que «frenan» o disienten del progresismo al interior de la Nueva Mayoría. «Tengo la convicción de que el próximo Gobierno va hacia el centro, luego de irnos a la derecha con Piñera y después demasiado a la izquierda con un sector de la Nueva Mayoría. El país quiere reformas pero con estabilidad y con acuerdo, y ese es el rol de la DC», aseguró.
Como una «rectificación», así describió el senador democratacristiano Ignacio Walker el segundo tiempo anunciado por la Presidenta Michelle Bachelet.
Y es que el parlamentario ha sido uno de los más férreos defensores de la postura de la DC al interior de la Nueva Mayoría, que han puesto freno al acelerador de la reformas impulsadas por el Ejecutivo. Fue el primero en decir que la gratuidad universal corría serio peligro en el contexto económico que vive el país.
Luego tildó de «arbitraria» y «discriminatoria» con las universidades privadas la decisión del Mineduc de establecer la gratuidad del 60% para las universidades del Cruch en una primera etapa, arremetida que no ha sido bien vista por los sectores más progresistas al interior del conglomerado oficialista.
Para el senador de la falange esta segunda etapa «no es un cambio de objetivos ni de contenidos fundamentales sino que en la forma de hacer las cosas, de entender que no podemos abusar de las urgencias, que hay que hacer más trabajo prelegislativo, buscar más diálogo y acuerdos en el Parlamento. Y que el financiamiento de la reforma educacional va a ir de acuerdo a las posibilidades de la economía».
Respecto a las voces que hablan de que la DC frena los procesos de cambio que impulsa la Nueva Mayoría, aseguró que «no siento que estemos frenando nada. Yo pido respeto por la diversidad interna de la Nueva Mayoría, evitar cualquier afán hegemónico y entender que la DC tiene que procurar una sintonía con el país emergente, la clase media y el voto moderado».
«Tengo la convicción de que el próximo gobierno va hacia el centro, luego de irnos a la derecha con Piñera y después demasiado a la izquierda con un sector de la Nueva Mayoría. El país quiere reformas pero con estabilidad y con acuerdo, y ese es el rol de la DC», agregó el senador a La Segunda.
De acuerdo al parlamentario, «la gente se da cuenta de que hemos hecho esfuerzos por contener estos impulsos
refundacionales propios del infantilismo progresista, cuyo corolario fue la retroexcavadora».
Respecto al cambio de ruta, o la «jerarquización y priorización de las reformas», el DC plantea que al interior de la Nueva Mayoría empiezan a «ser más conscientes de los límites».
«El realismo es parte de la política. Hoy hay dos prioridades absolutas: delincuencia y reactivación económica. Punto. La gente quiere tener tranquilidad en sus hogares, quiere transitar con seguridad por las calles, y la gente quiere tener trabajo. No hay reformas que puedan ser sostenibles sin crecimiento económico. Enseguida, tenemos que hacernos cargo de las tres reformas estructurales. Primero, la implementación de la reforma tributaria, sin perjuicio de las mejoras y adecuaciones tanto a nivel legal como de circulares, sin comprometer los objetivos de recaudación y redistribución. Segundo, la reforma educacional, que ha sido un camino muy accidentado, con mucho ruido…», agregó el senador.
Finalmente, señaló que «la tercera reforma estructural, en la que yo creo firmemente. Con Patricio Zapata hemos hecho una propuesta de una convención constituyente que resuelve bien este tema».
