Todos cuestionados en casos de aportes irregulares a la política
El primer discurso de este tipo en más de doscientos años estuvo plagado de referencias a la crisis de confianza que vive el Parlamento y anuncios pro transparencia como una nueva dirección de ética, una comisión para modernizar la gestión, el congelamiento de la dieta a partir de enero de 2016 y la imposición de que la actividad tenga dedicación exclusiva, entre otros puntos.
Este mediodía, después de 204 años de existencia, los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado, Marco Antonio Núñez y Patricio Walker, respectivamente, dieron su primera cuenta pública con un resumen de lo realizado en el último año y los desafíos que vienen en el corto y mediano plazo, especialmente en momentos en que el Parlamento vive una seria crisis de confianza, reflejada en el porcentaje inferior al 20% de la gente que confía en tal institución. Particularmente, expresa este pésimo momento el que algunos parlamentarios estén involucrados en casos de financiamiento irregular.
De esta manera, se pudo ver en el Salón de Honor a los senadores Eugenio Tuma (PPD), cuestionado por el mal uso de sus asignaciones parlamentarias; Iván Moreira y Ena Von Baer, involucrados en el caso Penta y en una situación similar a Jaime Orpis, quien está incluido en una indagatoria recientemente caratulada como de «lavado de dinero», a partir de los recursos recibidos por Corpesca, del grupo Angelini. Por último, en primera fila estuvo el senador Jorge Pizarro, involucrado en el caso SQM por una serie de «asesorías verbales» pagadas a una empresa de sus hijos por la minera no metálica.
Por eso, los discursos de ambos presidentes estuvieron marcados por referencias y promesas de transparencia. «No hemos estado ajenos al fenómeno mundial de la pérdida de la confianza de la ciudadanía hacia las instituciones que ostentan el poder, hacia el uso ilegítimo del poder de la política, esos acuerdos logrados en reuniones a puertas cerradas, a espaldas de los ciudadanos», dijo Marco Antonio Núñez. «Vamos a realizar un esfuerzo conjunto con el Senado para homologar no solo la información, el gasto y la manera de rendirlo, sino que, además, a los criterios y exigencias formales a los que sometemos a diputados y diputadas», agregó.
Núñez anunció la intención de congelar la dieta parlamentaria. Al igual que el Presidente del Senado, Patricio Walker, quien además agregó la convocatoria a una comisión de académicos y juristas de trayectoria, «para que en un plazo de tres meses nos entreguen un conjunto de propuestas destinadas a modernizar el proceso de generación de las leyes, incorporando nuevos mecanismos de participación ciudadana».
Walker hizo un mea culpa, afirmando que «hemos vivido tiempos complejos. Reconozco que muchas veces no hemos estado a la altura de lo que la ciudadanía esperaba de nosotros. En el campo político y empresarial se han evidenciado prácticas que estamos decididos a erradicar», aseguró.
En el contexto de la debilidad que han mostrado las comisiones de ética de ambas corporaciones a la hora de sancionar a los parlamentarios que actualmente enfrentan controversias, Patricio Walker anunció que se creará una Dirección de Ética y Transparencia parlamentaria, «que tendrá como misión apoyar el trabajo de las comisiones de ambas cámaras y, a su vez, cumplir tareas específicas», anunció.
Walker además adelantó la intención de incorporar al Congreso al sistema de Chile Compra y además la intención de imponer dedicación exclusiva en el cargo. «Con la sola excepción de la administración de ciertos bienes y el ejercicio de la docencia o de la profesión en forma gratuita», especificó.
Por último, el presidente del Senado aseguró tener la convicción de que «la mayoría de los senadores y diputados de nuestro país son personas honestas, que actúan con auténtica vocación de servicio».
