«Se puede verificar su materialidad física pero no su contenido» o utilidad para la filial de la minera no metálica, advierte el organismo.
Un informe elaborado por el Servicio de Impuestos Internos (SII) estableció que luego de analizar los antecedentes de respaldo aportados por SQM Salar S.A., estos «no se condicen con la remuneración pagada a la empresa Asesorías y Negocios SpA y Cristian Warner Comunicaciones Publicidad y Marketing EIRL para considerar como razonable el desembolso efectuado».
El documento fue emanado por los fiscalizadores de la Dirección de Grandes Contribuyentes, Área de Casos Especiales, que analiza las boletas de honorarios y facturas pagadas por SQM Salar entre 2009 y 2014.
La información sobre estos dos contribuyentes fue aportada por la empresa el 17 de abril pasado y complementada el 22 y 29 del mismo mes, de manera posterior a la primera entrega hecha ante el SII, consigna hoy El Mercurio.
Según el informe: SQM Salar entregó dos contratos suscritos con el ex secretario del PRO y estrecho colaborador de Marco Enríquez-Ominami, en 2011 y 2012, reseñándose el detalle de estos, especialmente el «incremento injustificado de los montos involucrados», de $4 millones en el primer período a $14 millones 300 mil, en el segundo.
En total, se trata de 34 pagos que suman más de $215 millones, entre 2011 y 2013.
De igual modo, señala que los informes emitidos por Warner -entre diciembre de 2011 y noviembre de 2013- «tenidos a la vista, se puede verificar su materialidad física pero no su contenido (…) los trabajos corresponden a una carpeta que contiene diversos recortes de prensa».
Por tal razón, concluyen, «no podemos pronunciarnos respecto del contenido de los informes mensuales, así como de la utilidad que habrían tenido para el contribuyente (SQM Salar)».
Respecto de AyN, la empresa de Giorigio Martelli, el análisis refiere que Salar acompañó 23 facturas, tres contratos y los correspondientes informes, emitidos entre 2012 y 2013.
«Tenidos a la vista, se puede verificar su materialidad física pero no su contenido», consignan los fiscalizadores del SII, añadiendo que fueron presentados a la filial de SQM en un «documento anillado, con una portada con el logo de la empresa prestadora, señalando el mes al que corresponde, con información de un diverso espectro».
«Respecto a la información aparecida en prensa, que cuestionarían la temporalidad de cierta información que aparecería en los informes, se verificó que los meses señalados existirían hechos noticiosos de una fecha posterior al informe mismo, de lo cual correspondería su análisis en una etapa de recopilación de antecedentes», recalca el documento.
