Se sumó así al del fiscal del caso Penta Carlos Gajardo, quien vio frustrado su objetivo de convertirse en nuevo fiscal metropolitano Oriente. La terna corre el riesgo de impugnarse, por el retiro de una magistrada de la Corte de San Miguel en medio de las exposiciones, pese a lo cual su voto igualmente fue contabilizado.
El fiscal Emiliano Arias, quien es el coordinador del equipo de platas políticas del Ministerio Público e investigador del caso SQM, no logró quedar dentro de la terna de la cual saldrá el nombre del nuevo fiscal regional metropolitano Occidente.
Lo anterior, tras el pronunciamiento de los integrantes de las cortes de Apelaciones de San Miguel y Santiago reunidos este lunes en el Centro de Justicia.
Los tres que siguen en carrera son la asesora jurídica de la Fiscalía Occidente Yasna Ríos, el persecutor de la Fiscalía Metropolitana Sur Francisco Bravo, ambos con 13 votos, y el ex fiscal regional de O’Higgins, José Luis Pérez Calaf, con 14 votos a favor. Cabe destacar que esta es la segunda vez que Pérez Calaf queda en terna en la Fiscalía Occidente. En la primera ocasión, el 2008, el abogado protagonizó una polémica con Sabas Chahuán ya que este último nombró a Solange Huerta, y no a él en el cargo, pese a que -según denunció- el Fiscal Nacional, supuestamente se lo había prometido. Después de ello, Pérez Calaf renunció al Ministerio Público.
En esta oportunidad, será nuevamente Chahuán quien resolverá en un plazo de 10 días el nuevo abogado al mando de la fiscalía regional.
El caso de Arias se suma al del fiscal del caso Penta Carlos Gajardo, quien vio frustrado su objetivo de convertirse en nuevo fiscal metropolitano Oriente. Este último tampoco logró quedar dentro de la terna, resultando elegido el ex fiscal de Tarapacá, Manuel Guerra.
La votación de los integrantes de los tribunales de alzada no estuvo ajena a la polémica, ya que la ministra Gloria Solís, de la corte de San Miguel, se retiró en medio de las exposiciones, justo después que realizara su discurso la fiscal Paula Falcón.
Según fuentes que estuvieron presentes, la magistrada no regresó a la sala y pese a ello igualmente se contabilizó su voto. Esto sería un antecedente concreto con el cual se podría impugnar la votación. Si esto ocurre y la impugnación se acoge, el proceso en su totalidad debería repetirse.
