Reflexiona en 15 puntos sobre el futuro de Chile
“No concibo la posibilidad de poder seguir avanzando sin intentar una mirada común y un entendimiento de envergadura, a la altura de lo que el país va a demandar. Podemos sostener una discusión interna, pero ha llegado el momento de hacer un planteamiento global del país al que queremos llegar, con unas metas compartidas”, señala el ex Presidente.
El ex Presidente Ricardo Lagos responde a las críticas de Revolución Democrática a su figura, afirmando que no pensar en el Chile del futuro no es un tema del pasado y que es el momento de hacer un planteamiento global del país al que se desea llegar, añadiendo que «nos hemos malacostumbrado a creer que tenemos solo derechos y no deberes».
En El Mercurio, Lagos plantea, a “modo de reflexión”, 15 puntos en los que expone distintos temas sobre el futuro y el presente del país, buscando respuestas para enfrentar de mejor forma el mundo que se aproxima.
En ese sentido, el ex mandatario abordó los cuestionamientos hechos por RD, partido que lidera el diputado Giorgio Jackson, el que lo trató como “candidato del pasado”.
“No quiero caer en rebatir eso de que usted es un señor del pasado… Eso me da lo mismo. Pero no es un tema del pasado pensar el Chile del futuro… Ha llegado el momento de hacer un planteamiento global del país al que queremos llegar, con metas compartidas que podemos discutir”, asegura.
Agrega que cada generación tiene su propia épica y la “nuestra fue la lucha contra Pinochet. Y los jóvenes de hoy tienen toda la razón en no sentirse convocados por eso, porque nacieron después. «Cuando me pidieron una opinión sobre Camila Vallejo, yo les dije: ‘Pienso en lo que yo era cuando tenía 20 años y presidente del Centro de Alumnos de Derecho; si me hablaban de Pedro Aguirre Cerda, para mí era un caballero que estaba en los libros de historia. Yo había nacido el 38, cuando Aguirre Cerda ganó la presidencia’”.
Y añade que “hoy, el clivaje del Sí y el No es reminiscencia, historia. Algo así como los o’higginistas y los carrerinos, que hasta el día de hoy no se ponen de acuerdo. Hay una etapa ahí”.
El ex jefe de Estado afirma que el salto que se ha dado ha sido “gigantesco”, por lo que “no concibo la posibilidad de poder seguir avanzando sin intentar una mirada común y un entendimiento de envergadura, a la altura de lo que el país va a demandar. Podemos sostener una discusión interna, pero ha llegado el momento de hacer un planteamiento global del país al que queremos llegar, con unas metas compartidas”.
En otro punto, Lagos explica la crisis “brutal de confianza” que vive el país actualmente, indicando que hay muchos factores que han conducido a esta especie de “tormenta perfecta”.
Menciona que tales factores se suman los recientes casos de financiamiento de la política a los que se suman los hechos de colusión de los mercados y los temas que involucran a la iglesia y al fútbol.
“La crisis de confianza crece cuando instituciones que jugaron un rol muy importante, como la Iglesia Católica, dejan de ser una voz moral que, te gustara o no, había que escuchar. Para colmo, estábamos contentos porque éramos buenos para el fútbol y more lo que nos ha pasado con la ANFP”, explica.
Lagos también señala que “es más fácil recuperar el entendimiento y la identidad nacional si se fijan metas de mediano y largo plazo… si nos planteamos hacia dónde queremos ir…”.
Además, sostiene que el nuevo chileno de clase media se siente exitoso y vulnerable, “exitoso porque se puso de pie por sus medios, y también vulnerable ante el temor de volver atrás. Sus demandas son mayores que las de antes, y la número uno es la educación de sus hijos. Exige sus derechos”.
Y arremete con que “nos hemos malacostumbrados, a medida que crecemos económicamente, a creer que tenemos solo derechos y no deberes… Yo sé que hay que hacer esfuerzos para los que están en situación difícil. Pero también hay responsabilidades”.
