La rectora de la Universidad de Aysén afirmó que no dejará el cargo hasta que sea notificada por Contraloría
La académica asegura que el Crédito con Aval del Estado es, a su juicio, «el causante de la crisis en que vivimos» y es, a la vez, «el instrumento más querido y más valorado por algunas personas».
En momentos en que su decreto de remoción debe ser aprobado por la Contraloría, la rectora de la futura Universidad de Aysén, Roxana Pey, cree que la petición de su salida viene de un sector del Gobierno que es reaccionario a la reforma, específicamente a la gratuidad en las universidades públicas, como es el caso del plantel que dirige y que funcionará desde 2017.
«Con los recursos que estaban comprometidos en la ley, nuestra proyección mostraba muy claramente que nuestra universidad podría nacer con buena calidad y sin necesidad de cobrar aranceles. Eso yo ya lo había comunicado y, desde ese momento en adelante, las relaciones [del Ejecutivo] con nosotros fueron distantes», dijo la académica a Radio ADN.
La rectora, quien aseguró que no va a renunciar hasta que sea oficialmente notificada, cree que la posibilidad de lograr la gratuidad efectiva «ha incomodado justamente a ese sector que está en el Gobierno que no comparte la propuesta de gratuidad, que no comparte el avanzar de esa manera, y lo que quiere es mantener el Crédito con Aval del Estado», explicó, agregando que esta fórmula es la «causante de la crisis que vivimos» en este ámbito. A su juicio, «parece que ese fuera el instrumento más querido y más valorado por algunas personas».
Pey detalló las razones por las que hasta ahora no ha dejado su cargo. «Me pareció que mi deber era no renunciar como si yo fuera una suche del Ministerio de Educación, que le pasan un papelucho, lo firma y se va con sus cositas para la casa sin decir nada», sentenció.
