Nuevo ministro de Justicia reclama por haber salido a responder «leseras»
«Yo tengo mis clientes, el colega tiene sus clientes. No tengo mayor conocimiento de los clientes que él atiende, como él tampoco sabe cuáles son mis propios clientes (…) no soy ni he sido abogado, consultor, ni tengo ninguna relación de ninguna especie con la empresa que el diputado Monckeberg menciona», puntualizó el secretario de Estado.
«Una de las razones por las que me resistía a volver a asumir un cargo de ministro de Estado es por el tiempo que desgraciadamente uno tiene que perder para andar respondiendo leseras que dicen algunos parlamentarios», reclamó el ministro de Justicia, Jaime Campos, al comienzo de una conferencia de prensa donde explicó a los periodistas que la denuncia hecha por el diputado RN Nicolás Monckeberg es «absolutamente falsa».
El secretario de Estado aseguró que lo dicho por el parlamentario evidencia falta de información, desconocimiento jurídico o quizás mala fe. «(Él) me imputa que yo estaría inhabilitado para desempeñar el cargo de ministro de Justicia por una supuesta relación que yo tendría con una imaginaria sociedad profesional que atiende a una empresa computacional. Sobre el particular, debo decir que todo aquello es absolutamente falso. Yo no tengo ninguna sociedad profesional con nadie. He ejercido mi profesión de abogado individualmente como persona natural», declaró Campos.
Respecto de la relación profesional que tiene con Francisco Zúñiga, abogado y ex asesor constitucional en la campaña presidencial de Michelle Bachelet, el titular de Justicia afirmó: «En relación con el colega que menciona, reiteró que no tengo ninguna sociedad profesional con él».
«Lo que sí tengo o la relación con la que él tengo es lo que se denomina como una ‘comunidad de techo’ en la que, junto con otros colegas, somos los dueños del inmueble donde está la oficina profesional de él y el despacho profesional mío. Pero cada cual atiende a sus propios clientes. Yo tengo mis clientes, el colega Zúñiga tiene sus clientes. No tengo mayor conocimiento de los clientes que él atiende, como él tampoco sabe cuáles son mis propios clientes», prosiguió.
«De suerte que debo categóricamente señalarles que no soy ni he sido abogado, consultor, ni tengo ninguna relación de ninguna especie con la empresa que el diputado Monckeberg menciona. De suerte que su denuncia es absolutamente falsa», concluyó.
Según el diputado Monckeberg, Campos tenía una relación con el estudio jurídico Zúñiga Matus, Campos Abogados, que representa a la empresa Morpho Sociedad Anónima, responsable del software que se aplicó en el Registro Civil y que habría provocado errores en el padrón electoral, según la versión entregada por ese organismo.
Al respecto, dijo que «el Gobierno debe aclarar si una vez más estamos frente a una improvisación o desprolijidad, o de frentón estaba en conocimiento de los vínculos del ministro Campos, y en consecuencia hubo mala fe».
«Esta actuación es muy grave y debe ser aclarada por el Gobierno a la brevedad. Aquí hay un evidente conflicto de interés, pues nadie puede pretender que quien fue nominado para aclarar y sancionar el escándalo del Registro Civil por los errores en el padrón electoral tenga como contraparte a su cliente directo, a quien representó en los últimos años», agregó el parlamentario.
