«No cabe ninguna duda de que después de una elección se generan momentos difíciles», pero primará «la vocación de entendimiento», sostuvo Marcelo Díaz.
«Yo tengo una larga tradición de trabajo con la Democracia Cristiana en el Congreso, desde la política, y no tengo ninguna duda de que ellos van a ser un factor que va a contribuir a resolver los problemas, que van a ser un factor de unidad», sostuvo esta mañana el ministro secretario general de Gobierno, Marcelo Díaz.
«No cabe ninguna duda de que después de una elección se generan momentos difíciles, de introspección, de análisis, pero finalmente la vocación de entendimiento y de acuerdo que ha existido siempre -en la Concertación antes y hoy en la Nueva Mayoría, de la que la Democracia Cristiana ha sido parte- va a quedar reflejada en este momento post electoral que estamos viviendo», agregó el portavoz del Ejecutivo en Radio Cooperativa.
De todos modos, el secretario de Estado advirtió que «una coalición que da gobierno a Chile no puede ventilar sus diferencias de manera hostil por los medios de comunicación».
«Lo que nosotros tenemos que evitar es lo que ocurre cuando uno pasa un mal momento electoral, como son, sin duda, las derrotas en algunas comunas emblemáticas que han impactado comunicacionalmente y han sido de mucho comentario; es no caer en una espiral de recriminaciones que no conducen a nada», acotó Díaz.
«Aquí hay que hacer un análisis sereno y, a partir de ahí reunirnos, identificar las cosas que tenemos que mejorar, cómo las vamos a mejorar, qué es lo que cada uno tiene que corregir para poder seguir el propósito que nos planteamos. Ahí no sobra nadie. (…) En la medida que el país vea que la coalición funciona unida, cohesionada y avanza en sus compromisos, eso después apreciado y valorado por los ciudadanos. A veces tenemos ruidos, nos cuesta mucho construir acuerdos, pero necesitamos interlocutores que nos ayuden a construir esos acuerdos», concluyó.
