A juicio del parlamentario, «todas estas legislaciones se hacen bajo presión, un poco para la galería, con poca seriedad técnica y viendo poco la experiencia comparada con otros países».
El senador y ex militante del PS, Fulvio Rossi, se refirió al debate que se ha generado respecto del refichaje de los partidos.
En entrevista con El Mercurio, el legislador dijo que «parece ser que hoy día existe una suerte de deporte nacional que trata no solo de desprestigiar la labor política, sino que también poner trabas para que estos partidos puedan constituirse como tales de acuerdo a la legislación actual».
«En vista de lo que está ocurriendo en estos tiempos, creo que fue una legislación hecha bajo cierta presión mediática, lo cual no siempre es bueno. La verdad, se pusieron condiciones o resquicios draconianos para poder constituirse como partido, en medio de una crisis profunda de legitimidad del sistema y de los propios partidos; eso evidentemente no favorece a la democracia», agregó el legislador.
Consultado por si está de acuerdo con que el Servicio Electoral (Servel) haya flexibilizado el refichaje de los partidos, comentó: «Se ha armado toda una batahola tremenda porque el Servel, en el uso de sus atribuciones, establece distintas alternativas para poder cumplir la ley. Desde esa perspectiva, uno esperaría que el Servel diese todas las facilidades y fuese una instancia flexible para el objetivo. ¿Cuál es el objetivo? ¿Qué los partidos desaparezcan? ¿El objetivo es que estas organizaciones políticas que se están agrupando puedan hacer un picnic con los partidos que tienen cierta historia?».
«Se pusieron requisitos muy elevados. Creo que está bien que el Servel tenga cierta flexibilidad. ¿Cuál es el objetivo? Si el objetivo es tratar de colaborar en estos procesos con los partidos políticos en la lógica de una democracia sana, entonces tiene sentido buscar distintas alternativas que responden a ciertas exigencias. Que puedas reficharte a través de un correo con un escaneo de tu carnet de identidad no me parece nada del otro mundo, como algunos han tratado de hacer ver. Todas estas legislaciones se hacen bajo presión, un poco para la galería, con poca seriedad técnica, viendo poco la experiencia comparada con otros países», concluyó.
