Instruirá un sumario para determinar eventuales responsabilidades administrativas
El ente contralor realizó una auditoría que estableció que la supervisión ejercida por la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas, entre los años 2015 y 2016, «no permite garantizar la cantidad y calidad de las raciones alimenticias que deben recibir los estudiantes de parte de las empresas prestadoras (…) se constató falta de higiene, inadecuada manipulación del producto terminado; inapropiado almacenamiento de alimentos; ausencia de .preocupación por controlar temperaturas de cocción, equipos y distribución; eliminación de raciones preparadas; presencia de escherichia colí; aporte calórico entregado por bandeja bajo el porcentaje establecido, entre otros aspectos».
Una auditoría hecha por la Contraloría al Programa de Alimentación Escolar (PAE) de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb), en la Región Metropolitana, ejecutado principalmente durante los años 2015 y 2016, estableció que la supervisión ejercida por la Junaeb «no permite garantizar la cantidad y calidad de las raciones alimenticias que deben recibir los estudiantes de parte de las empresas prestadoras».
«El 48% de los planteles de la muestra examinada no fueron fiscalizados en terreno por la Junaeb, que cuenta con una dotación para tal efecto de entre 4 y 10 funcionarios, para una cobertura de 1.790 colegios», señaló el informe.
De igual modo, acusó «una ausencia de supervisión de los contratos de servicio de alimentación y una falta de supervisión respecto de las prestaciones del servicio y de las operaciones del programa». Como asimismo, el incumplimientos sobre la certificación de las raciones servidas a los estudiantes y una supervisión parcial de la calidad de las materias primas y de las raciones servidas».
Y una «ausencia de supervisión de las buenas prácticas de fabricación o manufactura del concesionario». Al respecto, Contraloría concluyó: «El servicio deberá llevar a cabo las acciones conducentes a evitar la reiteración de las situaciones anotadas».
La entidad anunció que «se instruirá un sumario administrativo, a fin de determinar las eventuales responsabilidades administrativas de los funcionarios involucrados en los hechos anotados».
En el informe final verificó raciones asignadas qué superaban la cantidad autorizada o que exceden la matrícula del establecimiento. «En la revisión practicada a la entrega de los almuerzos se constató que en 5 establecimientos se preparó un 21,6% menos de las raciones asignadas; y que en 7 planteles el 25,4%, de las raciones servidas no fue consumido por los estudiantes, siendo eliminadas corno residuos. Sobre el particular, el servicio deberá implementar los controles que acrediten las raciones servidas, considerando los alcances anotados, a fin de optimizar el proceso de planificación y entrega de los servicios a los beneficiarios del PAE, lo que será materia de revisión en una próxima fiscalización», advirtió el ente contralor.
Sobre, la calidad de las raciones servidas, y el cumplimiento de las normas sanitarias- y análisis microbiológicos de minutas y cornposición de ácidos grasos, se constató falta de higiene, inadecuada manipulación del producto terminado; inapropiado almacenamiento de alimentos; ausencia de .preocupación por controlar temperaturas de cocción, equipos y distribución; eliminación de raciones preparadas; presencia de escherichia colí; aporte calórico entregado por bandeja bajo el porcentaje establecido, entre otros aspectos, sobre todo lo cual la entidad deberá adoptar medidas tendientes a evitar su reiteración, las que serán revisadas en una próxima fiscalización.
Al mismo tiempo, «se observaron debilidades de control en la entrega de los productos alimenticios, carencia de equipamiento, falta de higiene en cocinas y deficiencias en el almacenaje de materiales y alimentos. Así, en el 16% de los colegios de la muestra no se cumplió con la entrega oportuna de los alimentos; en el 28%, los productos alimenticios no se encontraban separados de otros elementos, y en el 8% se constataron frutas y verduras en mal estado, además de deficiencias en el almacenaje en 6 colegios, todo lo cual no se ajusta a lo dispuesto en las bases administrativas y técnicas del PAE».
Sobre, la calidad de las raciones servidas, y el cumplimiento de las normas sanitarias- y análisis microbiológicos de minutas y composición de ácidos grasos, «se constató falta de higiene, inadecuada manipulación del producto terminado; inapropiado almacenamiento de alimentos; ausencia de .preocupación por controlar temperaturas de cocción, equipos y distribución; eliminación de raciones preparadas; presencia de escherichia colí; aporte calórico entregado por bandeja bajo el porcentaje establecido, entre otros aspectos, sobre todo lo cual la entidad deberá adoptar medidas tendientes a evitar su reiteración, las que serán revisadas en una próxima fiscalización».
Sobre las sanciones y multas, el informe sentenció: «La Junaeb cursó multas proveniente de las fiscalizaciones realizadas en la Región Metropolitana en los años 2012 a 2015, las cuales fueron tramitadas y resueltas mediante actos administrativos dictados en la última anualidad indicada, por un total de $ 324.427.221, sin embargo, al 30 de septiembre de 2016 no ha percibido los montos aplicados en cada, debiendo adoptar las medidas pertinentes para agilizar el proceso de cobro de multas y obtener el ingreso efectivo de las mismas, informando su avance a este Organismo de Control, en un plazo de 60 días hábiles».
