El pasado fin de semana se informó de la muerte de Joane Florvil, mujer de nacionalidad haitiana que se encontraba detenida desde el pasado mes de agosto tras ser acusada de abandonar a su hija de dos meses en la Oficina de Protección de Derechos (ODP) de la comuna de Lo Prado.
El fiscal nacional, Jorge Abbott, reconoció hoy que en el caso de la ciudadana haitiana Joane Florvil el sistema policial y judicial chilreno «no fue capaz de comprender la cultura haitiana».
La mujer falleció mientras se encontraba detenida, tras ser acusada de abandonar a su hija de dos meses en la Oficina de Protección de Derechos (ODP) de la comuna de Lo Prado.
«Creo que el sistema no fue capaz de comprender, probablemente, la cultura haitiana. No tuvo la capacidad tampoco de poder comprender su idioma y eso derivó en algunas circunstancias que estamos investigando y esperamos que sirvan para poder mejorar nuestra relación», indicó Abbott en la inauguración de la Plaza Ciudadana «Derechos de los Migrantes en la Justicia», ubicada en el edificio de la Fiscalía Nacional.
Según la comunidad de haitianos en Chile, Joane Florvil nunca dejó a su hija, sino que había corrido tras un delincuente que le robó su bolso.
Durante su detención, la mujer comenzó a golpearse violentamente en la cabeza al no poder comunicarse con los funcionarios policiales. Esto, provocó serias lesiones, que obligaron a internarla en el recinto asistencial.
«Estamos investigando y yo creo que debemos establecer dónde hubo fallas del sistema que pudieron haber derivado en consecuencias negativas hacia la persona fallecida», señaló el fiscal nacional.
«Tenemos un aumento en las migraciones y esto supone un desafío importante para el Ministerio Público, porque ellos se ven muchas veces vinculados con el sistema penal, como víctima, testigos y eventualmente también como imputados y tiene que tener las capacidades para relacionarse con ellos. En especial con los colectivos que tenemos mayores dificultades», concluyó.
