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Crédito: Agencia UNO
El Presidente Piñera celebró el acuerdo que puso fin a 4 días de huelga, pero lanzó una advertencia sobre la toma de los recintos penales. Según el ministro de Justicia, el protocolo firmado con los funcionarios “resuelve nudos complejos”, como la carrera funcionaria y el mejoramiento de los sueldos de los escalafones más bajos.
Tras el acuerdo alcanzado con los funcionarios de Gendarmería, materializado después de horas de intensas negociaciones, el ministro de Justicia Hernán Larraín ponderó el significado del compromiso adoptado por el Gobierno: “Este acuerdo refleja un compromiso profundo. Habrá un antes y un después en la proyección de Gendarmería y su carrera”, señaló esta mañana en conferencia de prensa.
En el Gobierno hicieron un balance positivo del cierre de negociaciones, que tuvo una compleja firma de acuerdo que se dilató por varias horas durante la noche del jueves. Finalmente, recién pasadas las 2 de la madrugada de este viernes, se suscribió el documento que puso fin a los 4 días de huelga de la institución penitenciaria.
En el Ejecutivo había preocupación, debido al efecto mediático que tuvo el acuartelamiento de los gendarmes, y el cara a cara de los funcionarios penitenciarios con Carabineros en el penal de Santiago 1. “Más allá de las expresiones que uno a veces oye al calor de una movilización, lo que nos mueve es la comprensión de esos fenómenos, y eso contó con el respaldo del Presidente y los ministros que han ayudado a darle forma a este acuerdo”, enfatizó el ministro Larraín.
Ese punto también fue destacado por el Presidente Piñera. “Afortunadamente primó la razón, primó la cordura, llegamos a un acuerdo y pudimos resolver el problema y hoy día nuevamente Gendarmería está cumpliendo con sus labores habituales”, indicó al abordar el tema esta mañana ante una consulta de la prensa.
Piñera hizo alusión a la polémica de ayer en el penal santiaguino, enviando un mensaje que suena a advertencia frente a futuras movilizaciones. “Este Presidente y este Gobierno no solamente prometió cumplir el Estado de Derecho, sino que también hacer cumplir el Estado de Derecho y, en consecuencia quiero decir muy en claro, que nosotros no vamos a permitir que ocurran cosas como las que ocurrieron como fue la toma del Centro de Justicia o el no permitir la salida o el ingreso de las personas que tenían con concurrir a los Tribunales de Justicia y eso se lo hicimos ver en forma muy clara a Gendarmería y especialmente el día de ayer”, indicó.
Respecto a los puntos acordados, el ministro de Justicia señaló que el protocolo “resuelve nudos complejos”, como la carrera funcionaria y el mejoramiento de los sueldos de los escalafones más bajos.
“Este es un hecho de mucha significación. Estimamos que el trabajo de Gendarmería y sus trabajadores es un trabajo poco reconocido, y lo que estamos haciendo es manifestar un compromiso y reconocimiento con la labor de los trabajadores penitenciarios, sean o no uniformados”, dijo.
Larraín precisó que los funcionarios realizan una labor “compleja, dura y no reconocida socialmente, por eso mismo hemos puesto especial interés en resolver sus problemas. Este acuerdo refleja un compromiso profundo”.
El ministro señaló además que este acuerdo significa «un paso necesario pero no el único para lograr la modernización» de Gendarmería y añadió que de parte del Gobierno «está la voluntad de un compromiso que se empieza aplicar a partir del año 2019».
En esta línea, el Mandatario complementó la idea señalando que “tenemos un compromiso no solamente mejorar carrera funcionaria, mejorar mecanismos de habitabilidad, mejorar criterios de seguridad, tenemos un compromiso de fortalecer Gendarmería en una labor fundamental que hoy día no se está cumpliendo, que es no solamente cuidar a los presos, sino que también rehabilitar a los presos y por eso hay un programa de construcción de nuevas cárceles, tenemos un acuerdo dentro del proyecto”.
