PAÍS
El exsenador UDI, que está a la espera del inicio del juicio oral por el caso SQM, el mayor caso de corrupción de la historia de nuestro país, donde arriesga ser condenado por cohecho y delitos tributarios, recibió otro balde de agua fría. El 28° Juzgado Civil de Santiago canceló la personalidad jurídica y ordenó la disolución de la Fundación Chile Justo, que Longueira lanzó en el 2007 para generar políticas públicas, pero que –según el proceso– fue usada para triangular platas de la minera no metálica [ACTUALIZADA]
En el año 2007, el exsenador Pablo Longueira presentaba con bombos y platillos su nuevo proyecto, la Fundación Chile Justo, catalogándola como la entidad “que no solo va a ayudar a derrotar la extrema pobreza, sino también quiere crear políticas públicas para la clase media, ya que no existen”.
Pero el sueño del exhombre fuerte de la UDI quedó en nada, porque el 28° Juzgado Civil de Santiago canceló recientemente la personalidad jurídica de la fundación y ordenó su disolución.
El tribunal actuó de esta manera por requerimiento del Consejo de Defensa del Estado (CDE), que demandó a la entidad en octubre pasado.
Se trata de un nuevo golpe para el expresidente de la UDI y exministro de Economía durante el primer Gobierno de Sebastián Piñera. Longueira, además, está a la espera del inicio del juicio oral del caso SQM, el mayor caso de corrupción de la historia de nuestro país, donde arriesga ser condenado por cohecho y delitos tributarios.
Precisamente en este caso, la Fundación Chile Justo tiene un rol, porque en el proceso está acreditado que entre el 2007 y el 2013 Longueira recibió una mensualidad de SQM que no llegaba a él como persona natural, pero sí a Chile Justo y a otra entidad ligada a él, la Fundación Web.
De hecho, durante el proceso, el abogado querellante del caso SQM, Mauricio Daza, acusó que Longueira utilizaba fundaciones como esta “como verdaderos palos blancos para triangular dineros ilícitos que eran pagados en este caso por SQM”.
De acuerdo con La Segunda, el 28° Juzgado Civil de Santiago explicó la disolución, argumentando que la Fundación Chile Justo no cumplió con su obligación de entregar al Ministerio de Justicia una serie de documentos y balances financieros como toda fundación sin fines de lucro. En la fundación figura como presidente un cercano de Longueira, el exdiputado Cristián Leay.
