PAÍS
Créditos: Agencia Uno
La agrupación Ukamau lideró las manifestaciones, donde también llamaban a sumarse a la huelga feminista que se llevará a cabo el próximo viernes 8 de marzo.
Un atochado “súper lunes” vivieron los santiaguinos con la vuelta a la actividad laboral y estudiantil. Desde el Ministerio de Transportes identificaron 138 puntos críticos, con tiempos de traslado con demoras sobre los 15 minutos en promedio.
Pero la jornada se vio aún más complicada por la protesta en General Velásquez con la Alameda, donde pobladores bloquearon ambas calzadas, provocando un importante taco para quienes querían dirigirse al centro de Santiago.
Premunidos de bengalas y bombas de ruido, la agrupación Ukamau lideró esta protesta, que se desarrolló desde las siete de la mañana, provocando el actuar de Carabineros. En la movilización, participaron alrededor de 200 personas y se replicó en otros puntos de Santiago.
“Por muy legitimas que sean las manifestaciones, estamos velando por el buen tránsito del súper lunes”, dijo la intendenta metropolitana Karla Rubilar.
Una de las reivindicaciones de esta protesta fue convocar a la huelga feminista que se desarrollará el próximo viernes 8 de marzo. “Somos nosotras quienes nos encargamos de la crianza y las labores domésticas, que son labores estratégicas para el desarrollo del país y dicha labor siempre termina desdeñada y no tomada en cuenta, incluso para nuestra etapa de jubilación, sin derecho a pensiones”, señalaba uno de los panfletos de los manifestantes.
Otra de las consignas fue “desde las mujeres que venimos trabajando y levantando el derecho a la vivienda y la ciudad como ente articulador de las diversas luchas, estamos aquí nuevamente exigiendo una sociedad donde todas y todos tengamos las mismas oportunidades para poder desarrollarnos, tener una calidad de vida adecuada y humana”.
