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Peligra Reserva Mundial de la Biósfera La Campana ante megaproyecto de carretera eléctrica en Olmué PAÍS Foto: Cortesía.

Peligra Reserva Mundial de la Biósfera La Campana ante megaproyecto de carretera eléctrica en Olmué

Concebida como la carretera eléctrica más grande del país, la ejecución del proyecto Cardones-Polpaico se encuentra en el ojo del huracán, debido a la fuerte oposición de los habitantes de la Comunidad La Dormida, quienes han denunciado una serie de irregularidades por parte de la empresa Interchile, tales como vuelos en helicópteros y tala de hasta 3 mil metros cuadrados de bosque nativo, situación que ocurre pese a que, el 31 de enero, el Tribunal Ambiental de Santiago acogió la reclamación presentada por la comunidad en contra del SEA, ordenando a este organismo tramitar la solicitud de invalidación de la resolución que aprobó el proyecto.


La Reserva de la Biósfera Parque Nacional La Campana, en Olmué, está bajo amenaza. En su interior, la empresa Interchile pretende construir la línea de transmisión más grande del país, que contempla el levantamiento de torres de alta tensión en terrenos pertenecientes a la Comunidad Agrícola La Dormida, cuyos habitantes han respondido con una fuerte oposición, que puede hacer peligrar la materialización del megaproyecto eléctrico.

Tala de bosque nativo, vuelos no autorizados en helicópteros y campamentos ilegales, son algunas de las irregularidades denunciadas por los habitantes del sector, actividades que –aseguran– no fueron declaradas por Interchile en la Resolución de Calificación Ambiental (RCA). Ello, sin tomar en cuenta que la zona donde se pretende levantar estas torres fue declarada por la Unesco, en 1985, como Reserva de la Biósfera, espacio protegido que busca ser una base para el estudio y la mejora de la relación entre los humanos y la naturaleza. Detalle que también fue omitido por la empresa durante el proceso de Evaluación Ambiental.

Un informe de una comisión investigadora de la Cámara de Diputados del año 2016, referente a la actuación de los organismos públicos en el proceso de Evaluación Ambiental del proyecto Cardones-Polpaico, y al cual tuvo acceso El Mostrador, estableció que las RCA «se basaron en información incompleta y/o adulterada, ya que ninguna de las medidas guarda relación con la realidad de la zona por donde atraviesa el proyecto. Por otra parte, la manera en que fue levantada la información fue incompleta, desactualizada y adulterada, por lo que la validez de estas medidas resulta absolutamente cuestionable».

El mismo informe concluyó que Interchile «ha actuado de un modo inaceptable, desarrollando un conjunto de acciones manifiestamente reprochables (entrega de información falsa, presión indebida y engaño a comunidades afectadas, entre otras), por tanto, se requiere que este ‘lobby’ esté expresamente prohibido, debiendo paralizarse toda tramitación que presente estas anomalías y se sugiere dictar normas que prohíban estas prácticas, so pena de dejar de tramitar los proyectos donde se detecten».

Pero la empresa no ha cejado en su actuar, denuncian. Habitantes de la zona han revelado que, desde el 28 de febrero último, trabajadores mantienen tomado el predio de la comunidad, realizando obras inherentes al proyecto Cardones-Polpaico, en donde además se ha ejecutado la tala de bosque nativo. Hecho particularmente grave, considerando la existencia de la Adesmia resinosa, especie de arbusto que crece de 1 a 1,5 metros de altura, endémico en nuestro país, especialmente de la zona de la cordillera de la Costa de la Región de Valparaíso y la Región Metropolitana, y que además se encuentra en peligro de extinción. 

Los habitantes de La Dormida denuncian incluso actitudes de hostigamiento en su contra, así como ofertas económicas por parte de la empresa, que han sido –aseveran–rotundamente rechazadas.

Los hechos fueron denunciados ante la Corte de Valparaíso, a través de un recurso de reposición que señala que la compañía ha ingresado sin consentimiento a los terrenos de la comunidad, «propiedad que no está contemplada  en la franja concedida por la concesión a la recurrida Interchile S.A. y sobre la cual, por consiguiente, no tiene derecho alguno a pasar». 

El mismo documento hace referencia a la «destrucción irresponsable» de la Adesmia resinosa, así como también a los vuelos en helicópteros. 

Los habitantes de La Dormida consideran que el actuar de la empresa ha sido –a lo menos– cuestionable. Todo esto ocurre pese a que, el 31 de enero pasado, el Tribunal Ambiental de Santiago, por 2 votos contra 1, acogió la reclamación presentada por la comunidad en contra del SEA, ordenando a este organismo tramitar la solicitud de invalidación de la resolución que aprobó el proyecto de línea de transmisión Cardones-Polpaico. 

La carretera eléctrica más grande de Chile 

Campamento ilegal en el Cerro La Campana.

El proyecto Cardones-Polpaico, a cargo de la empresa Interchile, promete ser la carretera eléctrica más grande del país, identificada como una obra clave en materia de infraestructura. 

Información de la página web de la compañía explica que «la línea de transmisión eléctrica Cardones-Polpaico es el mayor proyecto de transmisión en Chile con una extensión de 753 kilómetros, que unirá la III Región del país con la Región Metropolitana, pasando por las regiones IV y V. En su trayecto, esta línea abarca 20 municipios y 68 localidades, tanto en la costa como a través del desierto de Atacama y la Cordillera de Los Andes». 

La entrada en operación de esta carretera eléctrica estaba prevista para diciembre de 2018, pero, debido a la oposición de la Comunidad Agrícola La Dormida, su puesta en marcha se ha retrasado. El proyecto fue licitado en el primer Gobierno de Sebastián Piñera y se le dio suma urgencia durante la segunda administración de Michelle Bachelet.

En ese sentido, Juan Molina, abogado representante de la Comunidad La Dormida, dijo a El Mostrador que «este proyecto se aprobó en el 2015, y dentro del proceso de evaluación (de Impacto Ambiental) se omitió que este proyecto impactaba en una Reserva de la Biósfera. Frente a eso, las comunidades presentaron distintos recursos que están en tramitación en este momento en el Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental, ciertos recursos de protección presentados por los cuales se pide que se paralice este proyecto mientras no se resuelva el punto capital, que es que no se evaluó una Reserva Mundial de la Biósfera, que está declarada como tal desde el año 1985».

«Lo que hemos visto es incumplimiento de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), en el sentido que hay cortes de bosques nativos, cortes de especies protegidas, entre ellas, una especie denominada Adesmia resinosa (…) que es declarada en vías de extinción en este país, y además ellos no han obtenido las autorizaciones judiciales para ingresar al predio, lo hicieron a la fuerza, y en este momento el fundo está tomado», dijo Molina. 

Según cálculos de la Comunidad La Dormida, Interchile ha talado más de 3 mil metros cuadrados de la Adesmia resinosa. 

«La empresa recurre a las peores prácticas, todas tipificadas en el Acuerdo de Escazú. Hacen ofertas de dinero, intentando comprar voluntades, ilegales y repudiables desde cualquier punto de vista. Han tratado de quebrar a la comunidad e implementan una verdadera política de ‘plata o querella’ a todos quienes simplemente estamos ejerciendo nuestro derecho de propiedad y cumpliendo con el deber de cualquier dueño de proteger la tierra que nos legaron nuestros abuelos. Además, realmente, yo no sé cómo estas personas duermen tranquilas, mientras destruyen una Reserva de La Biósfera», dijo Evelyn Marchant, dirigenta de La Dormida.

El concejal por la comuna de Olmué, Pablo Altamirano, también ha sido una voz activa en esta titánica lucha librada por las comunidades. Altamirano considera que es una «aberración» destruir una Reserva de la Biósfera como lo es el Parque Nacional La Campana, destacando que es la única en Sudamérica que tiene un clima mediterráneo. 

«De las 10 (Reservas de la Biósfera) que tiene Chile, esta es la única que tiene clima mediterráneo. De clima mediterráneo en el planeta hay solo cinco. Cuando el planeta ha tenido que enfrentar cataclismos, la vida emerge a partir de estos climas mediterráneos, porque la biodiversidad de flora y fauna ahí es muy amplia, y la vida emerge a partir de estos corredores. Entonces, destruir uno de ellos aquí en Sudamérica, que es el único que tenemos, sería realmente una aberración», dijo el concejal.

 «La empresa no está cumpliendo la ley»

La tensión en la zona se encuentra en su punto máximo. La Comunidad La Dormida exige que la empresa respete la ley. El senador del Partido por la Democracia (PPD), Guido Girardi, manifestó a El Mostrador su rechazo a la manera en que ha actuado Interchile.

«Lo que nosotros estamos pidiendo al Ministerio del Medio Ambiente y al Ministerio de Energía, es que la empresa cumpla con la ley. La empresa tiene un conjunto de autorizaciones que limitan su actuar. El problema es que la empresa está tomando atajos donde no está cumpliendo con la ley, y a mí me parece que, siendo La Dormida parte de la Reserva Nacional la Campana y siendo un área que es Patrimonio de la Humanidad de Unesco, merece un resguardo, merece que se la trate acorde a eso».

«Lo que la empresa no señaló es que esta era una reserva (…) nosotros estamos trabajando en la ley de delito ambiental. Si estuviera vigente la ley de delito ambiental, estas personas irían presas por omitir información relevante. Omitieron información relevante a la hora de tener la Resolución de Calificación Ambiental y eso no corresponde», agregó.

El senador tampoco titubeó a la hora de criticar a los organismos correspondientes, como la Superintendencia del Medio Ambiente y el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), por permitir que «no se incorporara la información de que esto era una reserva», lo que –a su juicio– da cuenta de lo que ha ocurrido en Chile en los últimos años en materia medioambiental. 

«Finalmente la institucionalidad ambiental está al servicio de los grandes proyectos, de los patrones y los dueños de fundo de este país, y no al servicio de las comunidades ni defendiendo el interés público, sino defendiendo el interés de las empresas, y eso ha sido sistemático, con Dominga y con muchos proyectos que han sido aprobados ilegalmente en este país, como Castilla, como Barrancones, como Pascua Lama. Aquí no hay una novedad, es lo que se ha venido haciendo siempre, es pasar sobre las comunidades defendiendo el interés de las empresas y no el interés público», fustigó. 

El legislador adelantó que la próxima semana, cuando comience a presidir la Comisión de Medio Ambiente del Senado, invitará a la comunidad y las ministras del Medio Ambiente y Energía, para ver «cómo se puede avanzar y se puede hacer que el proyecto se desarrolle y avance, pero cumpliendo con todas las normas legales». 

Interchile: «Tenemos la autorización legal para construir»

Consultados por El Mostrador, desde Interchile señalaron que cuentan con la autorización legal para construir en el predio. «Nuestro compromiso es completar la puesta en operación del proyecto que genera grandes beneficios al país y, sin embargo, los obstáculos que ha presentado la comunidad al avance de las obras bloqueando caminos, hostilizando a los trabajadores, judicializando la relación, han perjudicado la finalización del proyecto en la fecha prometida y nos ha llevado a buscar opciones tratando de minimizar los impactos», aseguraron en un comunicado.

La compañía también alega que su trabajo considera el respeto por el medio ambiente: «El trazado autorizado para la línea de transmisión Cardones-Polpaico cuenta con todos los estudios sociales y ambientales necesarios para asegurar la mejor opción, equilibrando el menor impacto en las personas y en el medio ambiente, con la viabilidad económica del proyecto y cuenta con Resolución de Calificación Ambiental vigente desde el año 2015».

«El proyecto LT Cardones-Polpaico se sometió, en su debido momento, a la evaluación ambiental del SEA, que consideró un proceso de participación ciudadana, recorriendo 20 comunas en cuatro regiones, incluyendo el territorio de la Reserva de la Biosfera, la empresa recibió y respondió más de 1500 consultas de comunidades en el proceso de tramitación ambiental y realizó más de 300 reuniones aclarando dudas y explicando los alcances reales del proyecto en el proceso de EIA y la presentación de tres adendas que dieron respuesta a los respectivos ICSARA que fueron formuladas por el evaluador. Por lo tanto, toda la discusión respecto al trazado y sus impactos ya fue evaluada en su oportunidad y consideradas en la respectiva RCA», agregaron.

Compensaciones económicas

Desde Interchile también aclararon lo referente a las compensaciones económicas, argumentando que han seguido todos los conductos establecidos por la Ley General de Servicios Eléctricos. En ese sentido, explicaron que «la indemnización corresponde a la fijada por una Comisión Tasadora independiente conformada por tres expertos designados por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), siguiendo el mismo procedimiento la Comisión fijo el monto a indemnizar. Interchile depositó ese valor en el tribunal como mandata la ley, con lo cual se obtiene el derecho a la servidumbre eléctrica, pudiendo el propietario seguir discutiendo el valor de la indemnización, lo que la Comunidad La Dormida realizó y está actualmente en curso. Es importante precisar, que esta acción no limita el derecho al transportador de construir la obra».

En la declaración también informaron sobre una propuesta que hicieron a la comunidad para el desarrollo de una Iniciativa de Conservación Privada (ICP), que, en el marco de la Ley Ambiental, permitiera desarrollar acciones de conservación para «revertir el proceso de degradación y deforestación que ya presenta el predio por el uso que la comunidad ha dado al mismo, tanto agrícola como segunda vivienda», y que no fue aceptada por los habitantes de La Dormida. 

«Las acciones realizadas por la comunidad, actuando incluso por fuera de la ley, han causado grandes perjuicios no solo a la empresa, sino al país, pues el retraso de la puesta en operación del proyecto impacta negativamente en el sistema eléctrico nacional y la descarbonización de la matriz energética. Nos hemos visto obligados a solicitar el auxilio y protección de la fuerza pública para poder completar la ejecución de las obras y poner en operación este proyecto de interés nacional».

La Comunidad Agrícola la Dormida no se rinde, y alegan que seguirán al pie del cañón en esta lucha. «Recurriremos y recurriremos hasta que las fuerzas nos acompañen a toda instancia judicial que la ley nos ampare. Iremos a los Tribunales y a las Cortes. A la justicia civil, penal y ambiental. Nunca nos rendiremos y defenderemos, ante la justicia, a la madre naturaleza que hoy llamamos Reserva de la Biósfera», sentenció Marchant.

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