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Un día después de la caída de Dobra Lusic como candidata a la Suprema, Haroldo Brito admitió que hay problemas con el sistema de postulaciones y concursos, algo que -a su juicio- hay que resolver. «La corte tiene tranquilidad en cuanto a que nos hemos sujetado al modo usual, que habiendo concluido esa etapa, lo ocurrido después es una cuestión que han podido valorar los otros participantes (…) la corte tiene participación exclusiva de la construcción de la quina y eso se hizo con las informaciones conocidas en este momento, en la etapa se hizo a nuestro criterio y prácticas», precisó.
El presidente de la Corte Suprema, Haroldo Brito, se refirió este jueves a la fallida nominación de Dobra Lusic para integrar el máximo tribunal, nombre que fue bajado el miércoles en la tarde por el Gobierno -cuando solo faltaban minutos para que iniciara la sesión en el Senado en la que se iba a votar su candidatura- ante los cuestionamientos a su trayectoria.
El titular del máximo tribunal no titubeó en apuntar a problemas con las postulaciones y concursos, algo que -a su juicio- hay que resolver.
«La corte tiene tranquilidad en cuanto a que nos hemos sujetado al modo usual, de que habiendo concluido esa etapa, lo ocurrido después es una cuestión que han podido valorar los otros participantes (…) la corte tiene participación exclusiva de la construcción de la quina y eso se hizo con las informaciones conocidas en este momento, en la etapa se hizo a nuestro criterio y prácticas», precisó.
Brito agregó que «evidentemente es necesario revisar algunas cosas, es muy importante la participación de los tres poderes del Estado».
La necesidad de un cambio en el sistema de nombramientos en el Poder Judicial también fue advertido por Soledad Piñeiro, presidenta de la Asociación Nacional de Magistrados. En una carta publicada en El Mercurio, la abogada apuntó a la necesidad de perfeccionar un sistema actual que calificó como “oscuro” y que convive con “conductas reñidas con la probidad y la ética”.
Además, apeló al Poder Judicial y Legislativo a “impulsar una efectiva solución al problema”. En este sentido, a las autoridades judiciales les pidió “dejar el camino libre para que las segundas asuman la tarea, tanto tiempo postergada, de repensar la estructura moderna y democrática del Poder Judicial”.
Tras la caída de Lusic, ahora la norma dicta que el Presidente debe elegir entre los otros cuatro integrantes de la quina elaborada por el máximo tribunal para llenar la vacante dejada por Milton Juica.
Los jueces que integran este grupo son Sergio Mora Vallejos, ministro de la Corte de Apelaciones de Coyhaique, Miguel Vázquez Plaza, ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, Roberto Contreras Olivares, ministro de la Corte de Apelaciones de San iguel y -María Angélica Repetto García, ministra de la Corte de Apelaciones de Valparaíso.
En el Congreso trascendió que la elegida sería la jueza de Valparaíso, para seguir dando una señal de género.El ministro de Justicia, Hernán Larraín, dará a conocer este jueves en la tarde el nombre escogido.
Desde que se conoció su nominación para integrar el máximo tribunal del país, el nombre de Dobra Lusic comenzó a estar en el ojo del huracán, cuyos antecedentes comenzaron a generar ruido ruido tanto mediático como en el Congreso.
La situación llegó a tal extremo que, pasadas las 14:30 de este miércoles, el Ejecutivo ingresó un oficio con la firma del Presidente Sebastián Piñera en la oficina de Partes del Congreso, dando cuenta del retiro del nombre, tras una lluvia de cuestionamientos en contra de la magistrada, marcada por sus vínculos con el “operador judicial” John Campos y sus resoluciones a favor de las isapres, entre otros puntos.
El Gobierno evitó así una derrota, dado que para conseguir su elección, Dobra Lusic necesitaba sumar 29 votos (de los 43 senadores en ejercicio). Sin embargo, los cálculos de La Moneda previa a la sesión eran que faltaban dos votos para asegurar el ascenso al máximo tribunal del país de la ministra.
