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Crédito: Agencia UNO (Archivo)
A juicio de la presidenta de la UDI, “en la medida que las campañas se desplieguen y se aúnen las fuerzas (…) puede pasar cualquier cosa”. Con todo, insistió en su tesis de la campaña del miedo, al advertir que “se puede poner en riesgo el plebiscito si no hay condiciones de seguridad”. Asimismo, rayó la cancha a Lavín, señalando que no representa al partido y nuevamente le abrió las puertas a José Antonio Kast para trabajar juntos en la campaña del rechazo.
La presidenta de la Unión Demócrata Independiente, Jacqueline van Rysselberghe, rayó la cancha al alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, por su postura a favor del apruebo en el plebiscito de abril, y nuevamente le abrió las puertas a José Antonio Kast para trabajar juntos en la campaña del rechazo.
En cuanto a la postura de Lavín, la carta presidencial mejor evaluada de la UDI, Van Rysselberghe reiteró que el partido entiende su punto de vista, pero limitó su rol, señalando que no representa a la colectividad.
«Él es un dirigente, una figura importante dentro de la UDI, un alcalde exitoso y la figura mejor evaluada. Eso lo entendemos perfectamente bien, pero él no tiene por qué representar al partido, ese rol lo tiene la directiva», señaló la parlamentaria en entrevista con El Mercurio.
En cuanto a José Antonio Kast, dijo estar dispuesta a trabajar en conjunto por el rechazo, señalando que “no tenemos ningún problema en que participe en la medida en que trabajemos en conjunto para potenciar el rechazo sin tratar de generar plataformas de liderazgos personales”.
A juicio de la presidenta de la UDI, “la opción del rechazo partió con menos de un 5% y ya vamos cerca de un 25%. Creo que en la medida que las campañas se desplieguen y se aúnen las fuerzas el porcentaje va a ir creciendo y será una campaña súper competitiva en la que puede pasar cualquier cosa”.
Sin embargo, en este contexto, la presidenta de la UDI insistió en su tesis de la campaña del miedo, advirtiendo sobre el clima de violencia que pone en duda el proceso constituyente. En ese sentido, reiteró que “se puede poner en riesgo el plebiscito si no hay condiciones de seguridad. Tienen que darse las condiciones de paz seguridad y orden público para que esto se puede realizar de buena manera. Si tenemos un plebiscito y posteriormente un proceso constituyente rodeado de violencia la legitimidad del proceso quedará en duda”.
