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La Seremi de Salud de la Región del Biobío había autorizado la realización de actividades religiosas, deportivas y culturales de menos de 50 personas en la zona, no obstante, con el recurso de protección interpuesto por un concejal de Chiguayante, se dejó sin efecto esta medida.
Este martes, la Corte de Apelaciones de Concepción tomó la determinación de suspender el decreto que permitía los cultos religiosos en la región del Biobío.
Más específicamente se trata de una orden de no innovar en un recurso de protección interpuesto por un concejal de la comuna de Chiguayante, que deja sin efecto la orden de la Seremi de Salud Biobío que autoriza la realización de actividades religiosas, deportivas y culturales de menos de 50 personas en la zona.
El documento señala que la decisión de dejar sin efecto el decreto se fundamenta en que existe una “amenaza, cierta, real y concreta sobre el derecho a la vida y a la integridad física y psíquica” en la realización de este tipo de actividades religiosas.
