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Aunque el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio no es parte del círculo cercano del Mandatario, ni tiene mucha relación con él, se las ha arreglado para aparecer como su principal defensor. Muestra de ello fue el «salvataje político» que significó la importación –de parte de la CPC– de 400 ventiladores mecánicos que trajo desde China, justo cuando los anuncios en la materia del exministro Jaime Mañalich hacían agua. El acierto en las gestiones para traer esos equipos le hizo ganar un punto al interior del piñerismo, lo que, sumado al activo rol que ha tenido, no solo como vocero del sector empresarial sino también como defensor de las políticas impulsadas por el Ejecutivo para abordar la pandemia, lo han consagrado como uno de los protagonistas en medio de la emergencia, ganándose aplausos y también críticas. En medio del avance del proyecto de retiro del 10% de los fondos de AFP, Sutil vive una de sus mayores pruebas como líder empresarial. Todos los ojos están puestos sobre él, especialmente desde su propio gremio, donde se espera que dé “mucho más” de lo que ya ha demostrado en sus “constantes declaraciones por la TV”.
Juan Sutil, presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), ha logrado captar la atención durante la pandemia del coronavirus. Se ha declarado como partidario del Rechazo ante el proceso constituyente y ha emitido polémicas declaraciones en defensa del gremio empresarial. Posturas con las que se ha convertido en uno de los principales aliados del Gobierno de Sebastián Piñera, justo en uno de los momentos políticos más débiles que ha tenido que enfrentar el Primer Mandatario.
Según fuentes de Palacio, Sutil ha sido un “insospechado respaldo” para el Gobierno. Aunque no es parte del círculo de empresarios cercanos al Jefe de Estado, logró ganarse el respeto del piñerismo, principalmente, por el rescate que coordinó –junto a su amigo, el embajador de Chile en China, Luis Schmidt– la llegada de numerosos equipos de respiradores artificiales justo en el momento en que el Gobierno era duramente criticado por la polémica de los ventiladores mecánicos que llegarían de China y que el propio embajador del gigante asiático en nuestro país se ocupó de desmentir. Todo ello fuera de las constantes muestras públicas de apoyo a los planes anunciados por el Ejecutivo. No obstante todo esto –señalan desde La Moneda–, “no significa que (Sutil) sea consejero o amigo del Presidente”. Ese rol –se apresuran en corregir– aún recae en el expresidente de la CPC, Alfonso Swett.
Como un soldado fiel, al que nadie ha llamado al combate, el empresario agrícola se alinea nuevamente con el Presidente Piñera en otra cruzada, en la que ambos podrían tener mucho que perder: el rechazo al proyecto de retiro del 10% de los fondos de AFP como una medida de última ratio para sortear la crisis económica por la pandemia. Tras la aprobación en general de la iniciativa en la Cámara de Diputados, Sutil sostuvo diversas entrevistas en las que arremetió contra el proyecto. Señaló, por ejemplo, que era “una mala noticia” para el país y, además, muy «impopular para quienes creemos que el sistema de pensiones es sagrado para un objetivo final”.
“Las AFP no son simpáticas para nadie, pero que han hecho bien la pega, la han hecho”, sostuvo.
El timonel de la CPC, en esta coyuntura, respaldó las medidas que ha entregado La Moneda: “En ninguna crisis ha habido una respuesta tan contundente de parte del Estado”, señaló a ADN Radio. Además destacó que el Gobierno ha hecho “una buena política pública”, versus las iniciativas de “activismo legislativo» que provienen del Congreso, y que –a su juicio– es lo «peor» que ha existido desde el retorno a la democracia.
A pesar de que a principios de julio señaló “estar disponible para conversar” la idea de un autopréstamo para los cotizantes de las AFP, en los días previos a la votación, Sutil se convirtió en uno de los principales detractores de la iniciativa, asegurando que los fondos de pensiones «son bienes sagrados». Esos dichos le valieron una ola de críticas por las que llegó a ser hasta trending topic en Twitter. Una atención, por cierto que –según quienes lo conocen– no es para nada una “una molestia” para el presidente de la CPC.
Como presidente de la CPC, Juan Sutil ha cimentado una postura muy distinta respecto al Gobierno, en comparación con la que mostró en el periodo anterior, cuando Michelle Bachelet era presidenta. En septiembre de 2017, el empresario agrícola señaló que el segundo periodo de la Mandataria “fue un mal Gobierno, que hizo transformaciones desprolijas e incorrectas, como la de educación, que deja a la familia fuera de ese proceso”.
En cambio, según una fuente del mundo empresarial, en el periodo de Piñera II, Sutil “se ha esforzado sobremanera para agradar”. Cuando el Mandatario anunció la creación de una comisión de especialistas para estudiar la implementación de una especie de control prelegislativo para la constitucionalidad de las iniciativas parlamentarias, Sutil planteó que «algunos parlamentarios que están promoviendo esto están cayendo en actos populistas y los que los están siguiendo con sus votos también». Y agregó que “lo importante es que senadores y diputados actúen con cordura y responsabilidad. No puedo entender que haya un colectivo que no esté dando el ancho”.
Además, ha salido en diversas ocasiones a respaldar la administración de Piñera y las políticas del ministro de Hacienda, Ignacio Briones. Por ejemplo, al ser consultado por el salvataje a Latam, sostuvo que “hay empresas estratégicas que también en algún momento dado pueden requerir algún tipo de apoyo».
Son diversas las iniciativas de respaldo que ha levantado en medio de la pandemia la CPC, una de las cuales fue la creación de un Fondo Privado de Emergencia de $94 mil millones aportado por las familias Luksic, Matte, Yarur, Solari y Cuneo. Pero la iniciativa que logró que Juan Sutil se ganara el respeto del piñerismo en La Moneda, fue el salvataje de los ventiladores mecánicos importados desde China.
A principios de abril, ya era claro que la estrategia del entonces ministro Jaime Mañalich para dotar de respiradores mecánicos a la red hospitalaria estaba fracasando y el anuncio de los mil ventiladores donados por China quedaba en nada. En medio de esa crisis es que Juan Sutil, junto a su amigo, el embajador en China, Luis Schmidt, salieron al mercado negro en el gigante asiático para traer a Chile más de 400 ventiladores. El empresario relató a Ciper que tuvo que entrar “a negociar con revendedores, especuladores” y que estuvo a punto de irse «con una maleta de billetes”, pero no le permitieron hacerlo. Una hazaña que le significó el reconocimiento público por parte del Presidente, quien señaló: “Quiero agradecer a Juan Sutil, a las empresas, a los empresarios”, cuando llegó el primer cargamento con ventiladores.
Un punto que le conceden a Sutil al interior del piñerismo es que, debido a sus «opiniones incendiarias”, ha logrado dejar en segundo plano al presidente de la Sofofa, Bernardo Larraín Matte, uno de los empresarios más críticos con el Gobierno de Sebastián Piñera. Cabe recordar que el timonel de la Sofofa hizo varias jugadas para tratar de estar a la cabeza de la CPC –incluso hasta instalar una presidencia rotativa– que quedaron en el olvido.
Con Larraín Matte, sin embargo, Juan Sutil comparte un amigo en común, el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, con quien colaboró cuando lideraba la cartera de Desarrollo Social y trató de impulsar el fallido Plan Araucanía. Sutil fue parte de la comisión Compromiso País, formada por Moreno para implementar políticas contra la pobreza en dicha zona del país. Esta había sido su conexión más cercana con el Gobierno, ya que –según asesores de La Moneda– el empresario agrícola hasta entonces no ha logrado llegar “al corazón del piñerismo”.
Al interior del mundo empresarial destacan que Sutil necesita mantener buenas relaciones con el Gobierno, ya que debe sacar adelante uno de sus proyectos más ambiciosos: la carretera hídrica. Iniciativa que amenaza con alterar toda la biodiversidad de la Región del Biobío, provocando un impacto de proporciones en la zona centro-sur y que ha despertado diversas manifestaciones y críticas dentro del mundo medioambiental y comunidades mapuche. Aunque ha logrado el apoyo de las comunidades agrupadas en el Parlamento Autónomo Koyang, que reúne a cinco lonkos de distintas zonas del denominado Wallmapu.
Antes de asumir como presidente de la CPC en marzo de este año, Juan Sutil ya había captado la atención de los medios. En plena revuelta de octubre, las Empresas Sutil, su conglomerado de agroindustria que factura US$ 250 millones de dólares anuales, quitó el auspicio a uno de los programas de CNN Chile, señalando que el canal tenía una cobertura “parcial” de las manifestaciones.
En enero de este año, en conversación con el mismo medio y en plena campaña para liderar la CPC, Sutil reveló que votará por la opción Rechazo en el plebiscito para una Nueva Constitución. «Yo voy a votar Rechazo por una razón muy simple: porque pienso que tiene que haber un equilibrio en las posiciones para poder sentarte a la mesa a conversar, a cómo contribuir al futuro. Yo creo que es muy difícil en la situación actual», subrayó el empresario. Palabras que causaron algunas críticas al interior de gremio empresarial y de las cuales ha tratado de desmarcarse desde que asumió en marzo. Aludiendo al plebiscito, el presidente de la CPC sostuvo que «el proceso constituyente es, sin duda, el desafío más importante que enfrentamos hoy los chilenos», pero advirtió que “se requiere un ambiente de orden y paz que garantice un proceso equilibrado”.
Pero su “intensa personalidad” le impediría dejar en claro sus opiniones, sentencia un miembro de la CPC. Ya en pleno desarrollo de la pandemia por coronavirus, el empresario ha tenido varias declaraciones que han sido flanco de críticas, por su calibre y también por el “extremo protagonismo” que ha tenido.
En medio de las críticas que surgían desde el mundo de los alcaldes y alcaldesas por la implementación de cuarentenas dinámicas como estrategia del Gobierno, Sutil salió en defensa de la estrategia de La Moneda y señaló: «Que le quede claro a la gente que los municipios y los ministerios no producen nada. Son los empresarios y los trabajadores quienes producen para el país».
También saltó al ruedo en defensa de las Isapres por el alza en los planes en medio de la crisis de salud. El presidente de la CPC justificó a las entidades y destacó que “en general las empresas reajustan los sueldos, se reajusta el sueldo mínimo todos los años, la vida aumenta, la vida sube y, por lo tanto, desde el punto de vista de lo que las Isapres necesitan hacer, es también enfrentar esos costos que tienen con los trabajadores de la salud, con los médicos, con el alza del costo de la vida”.
Una de sus declaraciones más complejas la hizo en el programa «Stock Disponible» del canal de cable Vía X. Fue consultado por los casos de Gustavo Gatica, Fabiola Campillay y el de diversos jóvenes que resultaron con daños oculares en las protestas del año pasado. Sutil lanzó una polémica frase: “Hubo una agresión de todos lados, esto no fue gratis. Si estos chiquillos se hubieran quedado en su casa y hubieran manifestado su malestar pacíficamente, probablemente no habríamos tenido que lamentar ninguno de estos hechos», sostuvo. Al día siguiente el presidente de la CPC apareció en el matinal de Canal 13 ofreciéndole trabajo a un hombre de 74 años que había perdido sus ingresos debido a la pandemia.
Entre otras iniciativas respecto a las cuales se refirió el empresario, está la prohibición de repartir utilidades por Ley de Protección al Empleo, la cual calificó “como una mala política pública” y también se negó a dialogar respecto a la idea de generar un impuesto a los super ricos para financiar ayudas sociales, lo que según personeros de la oposición deja en evidencia que las iniciativas que ha impulsado responden a un lavado de imagen.
“Cuando surge la pandemia, los empresarios ven una oportunidad de oro para mejorar su imagen. Sutil instaló este concepto de la caridad y de ser aliados con el Gobierno, pero eso es un lavado de imagen. Pero cuando se necesitan cambios no están dispuestos a apoyar, eso queda claro con el proyecto de impuestos a los super ricos. Sutil le dio un portazo”, destaca el presidente de la Comisión de hHacienda, Daniel Núñez (PC).
“Sutil es como el resto de los empresarios en el país, actúan como patrón de fundo, pretende estar por arriba del resto de la ciudadanía y del mundo político y en definitiva tener la última palabra. Lo he visto con reacciones menos histéricas a la que tenían los empresarios con el Gobierno de Michelle Bachelet, que eran más agresivos. Se explica eso porque veo que Sutil debe tener línea directa con el Presidente Piñera y sabe que cuidarán sus intereses, eso quedó claro con el debate de los fondos de las AFP: fue el Presidente Piñera quien mandó a sus ministros a dar vuelta la votación”, agrega el diputado.
Hace una semana el Mineduc había convocado a una conferencia de prensa junto al líder de la CPC para dar a conocer una iniciativa que permitiría a los estudiantes de liceos técnicos hacer prácticas online, la cual fue suspendida. Al interior del oficialismo señalan que el empresario ha tenido “un gran y particular protagonismo” en medio de la pandemia, que se “agradecen los apoyos”, pero que es importante que se vea la diferencia clara con el dirigente empresarial.
Para la presidenta de la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja, la diputada Gael Yeomans (CS), “Sutil es el mejor aliado que ha tenido el Gobierno para mantener aguas tranquilas con el mundo empresarial en el momento donde están más solos. Incluso tantas veces ha sido un vocero más para respaldar las decisiones de Piñera en distintos medios de comunicación. Además, su relación ha sido altamente beneficiosa para ambos: el Gobierno con ellos logró descomprimir la presión que tenía encima por traer más ventiladores a nuestro país y, de vuelta, los empresarios tuvieron vitrina casi en cadena nacional para una de las campañas de responsabilidad empresarial más grande que hemos visto».
En La Moneda intentan separar aguas. Destacan que la alianza público-privada ha sido fundamental para sortear la crisis y que “sin duda el respaldo y apoyo del señor Sutil ha sido muy importante, al igual que el de otros empresarios, como Andrónico Luksic, quien trajo un aporte importante de mascarillas”, pero que estas señales no significan que los empresarios tengan alguna “influencia indebida” o que se les deban “favores” desde el Gobierno de Sebastián Piñera.
