PAÍS
EPA/BBC
Sindicado reiteradamente en las redes sociales chilenas como el autor del “mecanismo” destinado a obtener dinero del fisco por medio de ONGs, el diputado de Más País (y miembro de Podemos hasta 2019) es un hombre muy cercano al exvicepresidente boliviano Álvaro García Linera, fue asesor del Gobierno venezolano y formó parte de la polémica fundación CEPS, vinculada a su expartido. Además, es autor del prólogo de un libro llamado “La superioridad moral de la izquierda” y tiene extensos lazos con las principales figuras del Frente Amplio.
Habían pasado solo 20 días desde la segunda vuelta de la elección de 2021 y el entonces recién electo Presidente de la República, Gabriel Boric, leía con entusiasmo el libro Con todo. De los años veloces al futuro, editado por Planeta el mismo año. Con un bolígrafo azul subrayó con cuidado (como lo denotan las líneas) dos sentencias de este: “Los revolucionarios se prueban cuando son capaces de generar orden” y que ello “incluya también a la mayor parte de quienes estaban en contra de él”. Luego, fotografió la hoja y la publicó en Twitter, expresando al respecto: “Reflexión clave para los tiempos que vienen: la capacidad de construir un orden común”.
Del otro lado del Atlántico, el autor le respondió de inmediato: “Un honor, compañero presidente @gabrielboric. Lo conversaremos pronto! #Con todo”.
Quien respondía era el diputado español Íñigo Errejón, uno de los fundadores de Podemos, el partido político espejo del Frente Amplio (FA) en España. Aunque ambos conglomerados se desarrollaron en forma paralela y si bien Errejón es solo algunos años mayor mayor que el Presidente Boric o el ministro Giorgio Jackson (tiene 39, versus los 37 del primero y los 36 del segundo), para el FA es un verdadero gurú, pero no solo en lo ideológico sino también en la praxis, pues amén de sus credenciales académicas tiene una gran experiencia en la práctica política, y no solamente en España, también en la Venezuela de Hugo Chávez, país y gobernante estrechamente ligados al CEPS (Centro Europeo de Estudios Políticos y Sociales) de la señalada nación de la península ibérica, fundación de la cual surgieron los líderes de Podemos.
Por estos días, Errejón es constantemente nombrado en las redes sociales chilenas como el autor del “mecanismo”, como muchos llaman al sistema de obtención de dinero fiscal por medio de fundaciones, aludiendo a “O mecanismo”, la estratagema de campaña del Partido de los Trabajadores (PT), en Brasil, para sustraer dinero de la estatal Petrobrás, escándalo en medio del cual fue condenado y luego absuelto el actual presidente de ese país, Luiz Inácio Lula de Silva.
En 2017, en un encuentro en Madrid, Errejón explicó que, ante la perspectiva de perder elecciones, es necesario “dejar sembrado instituciones populares que resistan y, por cierto, donde refugiarse cuando gobierne el adversario”, algo en lo cual muchos han visto una alusión a la idea de crear fundaciones.
En la misma ocasión aseveró que, para cuando se pierdan elecciones, “hace falta una estructura económica autónoma, que vaya a permitir, pues por ejemplo, acoger a una buena parte de los cuadros militantes que hoy se están dedicando a los trabajos institucionales”. Asimismo, recordaba que “uno de los dramas en Argentina, al perder el gobierno nacional y popular las elecciones, y ganar las elecciones el señor Macri, pues lo que ha pasado es que… no hay estructura para sostener tanta militancia, porque la militancia, como todo el mundo sabe, no se sostiene solo del aire”.
Entre otras cosas, Errejón sabe bastante de fundaciones debido a su extenso paso por el CEPS, donde también trabajó Pablo Iglesias (el principal referente de Podemos), aunque no son los únicos. Según ABC, al menos nueve diputados que debutaron en la legislatura de 2017 provenían del CEPS, al cual el diario conservador se refiere como “la red financiada por Chávez y Maduro”, pues –como informó El País en 2014– en los 10 años previos dicha fundación recibió al menos 3.7 millones de euros desde Venezuela, por supuestas asesorías políticas, entre ellas, las realizadas por Errejón.
Licenciado en Ciencias Políticas en la Universidad Complutense de Madrid (2006), se doctoró allí mismo el 2012 con la tesis La lucha por la hegemonía durante el primer gobierno del MAS en Bolivia (2006-2009): un análisis discursivo, que trata acerca de la forma en que el Movimiento al Socialismo (MAS), el grupo de Evo Morales, pudo acceder al poder.
Las 656 páginas de la tesis comienzan con los clásicos agradecimientos, en los cuales señala que “a los compañer@s del CEPS les agradezco enormemente la primera confianza en mí al enviarme a Bolivia a finales de 2006 a trabajar con la Asamblea Constituyente, donde tanto aprendí”, afirmando que “la relación con CEPS, desde entonces, no ha hecho sino incrementarse, constituyendo para mí una ilusión militante y una escuela de formación constante”.
Fue en Bolivia también donde se deslumbró con la figura de Álvaro García Linera, el teórico autodidacta que a mediados de los años 80 fundó el Ejército Guerrillero Tupac Katari (EGTK) junto a Felipe Quispe, más conocido como “Mallku”. Luego de estar encarcelado durante cinco años (entre 1992 y 1997), García Linera se involucró en política y hacia el 2000 conoció a Evo Morales, pasando a formar parte del MAS.
El exvicepresidente de Bolivia, que también es una de las inspiraciones políticas del Frente Amplio chileno, es muy citado en la tesis doctoral de Errejón y posteriormente han escrito papers académicos juntos. Sobre él, señala en Con todo que es su amigo y que “es una persona a la que admiro profundamente”.
La última vez que García Linera estuvo en Chile fue en abril pasado, cuando la fundación “Rumbo Colectivo”, de Revolución Democrática (RD), lo invitó al seminario “Construir futuro”, el cual fue publicitado por la entidad como un encuentro que contaría “con uno de los intelectuales de mayor relevancia en el continente”, en referencia al exvicepresidente boliviano.
El periplo americano de Errejón, sin embargo, no terminó en La Paz, pues pasó varias temporadas en Caracas asesorando al Gobierno de Hugo Chávez por medio del CEPS, junto a otros históricos de dicha fundación. Cuando el político y militar murió, expresó que “es un privilegio el haber vivido la mayor muestra de pasión política, de cariño popular que haya conocido y que posiblemente jamás conozca”.
Según ABC, el Gobierno de Chávez en realidad pagó 7 millones de euros (el doble de lo que informó en su oportunidad El País) al CEPS entre 2003 y 2012, con un objetivo en mente: la creación de un partido afín al chavismo en España, el que dicho periódico argumentaba que era Podemos.
Sin embargo, en 2015, La Vanguardia aseveró que buena parte de la información se basaba en informes policiales “que nunca se llegaron a judicializar ante la falta de credibilidad que ofrecían” y que, a su vez, se sostenían en “testimonios de personas supuestamente conocedoras de la financiación ilegal del partido por parte del régimen de Chávez”, pero cuyos dichos no fueron comprobados.
Pese a ello, al año siguiente se abrieron investigaciones en Venezuela –a pedido de diputados opositores– y también en España, todas las cuales fueron archivadas. La última de ellas –cerrada el año pasado– se inició en 2021, luego de la captura del exjefe de la contrainteligencia venezolana, el general Hugo Carvajal Barrios, quien fue detenido en Madrid, acusado por la justicia de Estados Unidos de estar vinculado al Cartel de Sinaloa. Tras su arresto, Carvajal entregó supuestas evidencias de que el CEPS había sido financiado por Chávez con el objetivo de crear a Podemos, como una especie de sucursal chavista en Europa, pero la causa fue también cerrada en 2022 por la Audiencia Nacional de España, por falta de evidencias.
En el momento en que Carvajal fue detenido el CEPS ya no existía. En 2018, cuando arreciaban las polémicas en su contra, simplemente dejó de funcionar, de un día para otro.
Sin embargo, las huellas del CEPS quedaron estampadas en otra ONG, pero esta vez ubicada en Ecuador, país en el cual la fundación vinculada a Podemos también efectuó una serie de asesorías durante el mandato de Rafael Correa. Se trata de Celag (Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica), cuyo comité ejecutivo integran, entre otros, el propio Rafael Correa, Álvaro García Linera, el cientista político argentino Atilio Borón y dos de los máximos líderes de Podemos: su fundador, Pablo Iglesias, y Juan Carlos Monedero.
Por cierto, de acuerdo con la página web del organismo, hay una chilena en dicho consejo: la actual ministra de la Secretaría General de Gobierno, Camila Vallejo.
Creado en 2014, Errejón también participó en el Celag, pero ya no está en él, debido a que en 2019 rompió para siempre con su primera tienda y creó su propio movimiento: Más País, en un evidente guiño al MAS boliviano.
Una de las frases que más le ha sido recriminada al actual ministro Giorgio Jackson fue aquella de que “nuestra escala de valores y principios en torno a la política no solo dista del Gobierno anterior, sino que creo que frente a una generación que nos antecedió, que podía estar identificada con el mismo rango de espectro político, como la centroizquierda y la izquierda”, la que pronunció durante una transmisión de Twitch.
Se trata de una visión que comparte Errejón, quien en 2018 prologó un libro de Ignacio Sánchez-Cuenca llamado La superioridad moral de la izquierda. En dicho texto, Errejón asegura que “la izquierda, en todo caso, es una metáfora para agrupar a los partidarios de un orden más justo”, agregando que el autor “aporta elementos sólidos para argumentar que las ideas que tradicionalmente damos en llamar de izquierdas están sustentadas en valores preferibles, combatiendo así el relativismo moral”, junto con afirmar que “como las izquierdas poseen la verdad antes y con independencia de que esta se comparta mayoritariamente en su sociedad (…), la prueba del efecto real que sus ideas producen no le afecta o, al menos, no es un dato principal”.
En octubre de 2018, Errejón viajó a Chile a participar de un “festival” organizado por Revolución Democrática (RD), llamado “A toda marcha”, donde fue la estrella indiscutida, a tal punto que el discurso de cierre, realizado en la Usach, fue pronunciado por el español. En la ocasión, partió diciendo que sus padres nunca habían estado en Chile, pero que de niño le contaban historias sobre la experiencia socialista en el país y que su madre le cantaba canciones antidictatoriales chilenas. En Con Todo escribiría después que “creo que es uno de mis mejores discursos”.
En su speech aseguró que “nosotros venimos a asegurar que sustituimos el despotismo de los de arriba, la ley del más fuerte, por un contrato social que instaura la ley del más débil”. El actual Presidente de la República también difundió la actividad, publicando una foto en la cual se ve a Errejón con varios miembros del Frente Amplio, entre ellos, el diputado Gonzalo Winter y el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp.
Los contactos del parlamentario europeo con Revolución Democrática y su fundador, el ministro Giorgio Jackson, son anteriores, en todo caso. En 2016, por ejemplo, por Twitter, el actual titular de Desarrollo Social alababa una entrevista de Errejón, luego de lo cual le preguntaba: “¿Sigues con el mismo correo de la universidad?”.
Ese mismo año, Jackson y el entonces diputado Gabriel Boric enviaban un video desde el Parlamento a “la lista Unidos Podemos”, para las elecciones del 26 de junio de ese año. El ahora Mandatario decía que “desde el otro lado del charco les enviamos un abrazo fraterno, revolucionario y les decimos que también, en este país llamado Chile, estamos dando una pelea que ustedes están dando en España”.
En 2021, ya fuera de Podemos, Errejón seguía siendo un referente para el FA. Ese año, entre otras cosas, participó de un foro virtual en el contexto de la candidatura al Senado de Sebastián Depolo (actual embajador de Chile en Brasil), junto a la periodista Beatriz Sánchez (hoy embajadora de Chile en México) y Álvaro García Linera. Por las mismas fechas participó también de un live de Instagram junto a Miguel Crispi –por aquel entonces candidato a diputado y, en la actualidad, jefe del Segundo Piso de La Moneda–.
Ese mismo año, Íñigo Errejón fue insultado en el Congreso español, cuando solicitaba actualizar las políticas de salud mental, momento en que un diputado del Partido Popular (PP, la derecha tradicional) le gritó: “¡Vete al médico!”. Errejón relató lo sucedido en su cuenta de Twitter, ante lo cual el entonces diputado Boric respondió que lo acaecido a su par ibérico pasaba mucho en Chile: “Cada vez que hablamos de la importancia de la salud mental sale algún troll de derecha a decirme que vaya al médico o a insultarme por mi TOC”.
El 11 de marzo del año pasado, en tanto, luego de la investidura de Gabriel Boric como Presidente, Errejón le deseaba “toda la fortuna, todo el acierto para avanzar. A este lado aprenderemos y seguiremos su ejemplo. ¡Enhorabuena, compañero!”.
