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Una nueva y última mesa negociadora, integrada por cuatro expertos de izquierdas y cuatro de derechas, sigue intentando llegar a acuerdos sobre observaciones que le hará la Comisión Experta al Consejo Constitucional. Hasta la noche de este lunes los avances eran mínimos, apenas algunas nuevas redacciones, pero nada nuevo en temas sustantivos. Temas como educación, pensiones, salud y protección de la vida de quien está por nacer no se han discutido todavía y aunque desde las derechas apuntan que habrá apertura, desde las izquierdas acusan que eso aún no ha ocurrido.
Continúan las negociaciones para acordar observaciones que la Comisión Experta, órgano de 24 personas elegidas por el Congreso Nacional, le hará al texto despachado a mediados de la semana pasada por el Consejo Constitucional. En la jornada de ayer se terminaron las negociaciones a nivel de subcomisiones y se conformó una “última mesa de negociación” para destrabar los nudos críticos.
El problema es que había un punto muerto en las tratativas y se esperaba que esta nueva instancia podría haber avanzado, cuestión que no ocurrió, al menos hasta la noche de este lunes. Esta instancia tiene cuatro representantes por derecha y cuatro por izquierda: Carlos Frontaura (REP), Máximo Pavez (UDI), Juan José Ossa (RN), el vicepresidente de la Comisión Experta Sebastián Soto (EVO), Alejandra Krauss (DC), la presidenta del órgano Verónica Undurraga (PPD), Gabriel Osorio (PS) y Antonia Rivas (CS), que se reunieron desde las 17.00 hasta altas horas de la noche con nulos avances sustantivos.
Durante todo el día, en varias salas del ex Congreso Nacional, se reunieron asesores de ambos sectores preparando propuestas de enmiendas al texto constitucional para ser presentadas al Pleno, pero no existe espacio –por el momento– para llegar a un acuerdo amplio como era pretensión de las izquierdas. Desde las derechas quieren ir tema por tema, “como una lista de supermercado”, indican desde el oficialismo. Todo este debate está terminando en que ninguna de las observaciones será presentada por expertos de ambos sectores y más bien se presentarán “enmiendas de derechas” y “enmiendas de izquierdas” que, según su mérito, podrían conseguir respaldo transversal.
El Pleno de votación de la Comisión Experta está previsto que comience este miércoles, pero no se descarta aplazarlo hasta el jueves, plazo fatal para que los expertos despachen sus observaciones al texto que serán votadas por el Consejo Constitucional el próximo 16 de octubre.
Pese a que durante la tarde los comisionados expertos de Chile Vamos se veían contentos por el avance de las negociaciones, con la llegada de la noche esos rostros cambiaron a desazón, por lo alejadas que estaban las posiciones con los comisionados expertos de las izquierdas. Desde el oficialismo, en tanto, siempre se vieron escépticos de llegar a un “gran acuerdo” y ronda el temor de que, por descarte, se vean obligados a terminar apoyando propuestas de Chile Vamos, “porque entre el texto del Consejo Constitucional y la propuesta de la derecha, tendremos que plegarnos, van a estar los votos”, dicen con desgano desde las izquierdas.
Desde la derecha tradicional indican que han entregado mucho, aunque no sobre los temas claves que afligen al oficialismo, como “constitucionalización de isapres o AFP, normas relevantes en sistema político, las restricciones al derecho a huelga, el derecho a la vida de quien está por nacer, entre muchos otros”, señala a El Mostrador una fuente oficialista.
Por mientras esto ocurría, se veían asesores del Partido Republicano en reuniones con sus pares en Chile Vamos. Además los consejeros republicanos Luis Silva y Antonio Barchiesi se vieron “marcando presencia”, según la derecha. Incluso el mismo Silva (REP) se dejó ver intercambiando opiniones con los comisionados expertos de Chile Vamos en los patios del ex Congreso Nacional.
Desde RN y la UDI indican que cuestiones como cambiar el “derecho a la vida del que está por nacer” o eliminar la causal de “grave amenaza terrorista” para implantar un estado de sitio son cuestiones en las que se puede flexibilizar, pero desde el oficialismo alegan que esa apertura, por ahora, no ha existido. Hasta un comisionado experto de derecha le solicitó al oficialismo ser más flexibles, porque tienen “que ir a convencer al otro lado”, haciendo alusión directa al Partido Republicano y su poder de veto.
La “última mesa” ha sido más bien monótona, dicen participantes de la instancia, pues ha consistido más bien en indicar cuáles son los puntos más críticos para cada sector y “mostrar las cartas de hasta dónde se pueden mover”. Al final de esta edición, los nulos avances hacen pensar que el acuerdo transversal está cada vez más lejos y que las observaciones, en su gran mayoría, serán cambios de redacciones, “salvo que la derecha comience a negociar en serio”, sentencian desde el oficialismo.
