“No me pregunten sobre este plebiscito de mañana, no tenemos derecho a decir por qué opción tomar”, dijo en su homilia.
Con una misa en la Catedrial Metropolitana inició sus funciones como Arzobispo de Santiago el sacerdote Fernando Chomalí. Fue una ceremonia sencilla con algunas autoridades como la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler y el ministro secretario general de la presidencia, Álvaro Elizalde. El día antes del plebiscito constitucional, el sacerdote advirtió que no tendrá un rol político y pidió que no le pregunten por leyes o decisiones administrativas.
“No me pregunten sobre este plebiscito de mañana, no tenemos derecho a decir por qué opción tomar”, dijo en su homilia. Sin embargo, continúo con una fuerte crítica a la sociedad y los derechos sociales. “Sí nos corresponde preguntarnos cuál es el mejor camino para el futuro de Chile. Cuáles son aquellos valores que trascienden de tal manera que las personas puedan vivir en paz. Puedan tener una educación de calidad y que los padres puedan elegir dónde educar a sus hijos; la libertad religiosa; la libertad para emprender; la seguridad de acuerdo a un Estado de derecho y el respeto a la vida siempre bajo todas las condiciones”, dijo.
Chomalí fue nombrado por el Papa Francisco para ser Arzobispo de Santiago, luego de estar 12 años como Arzobispo de la Santísima Concepción, en la región del Bío Bío.
Acá parte de la homilía de Fernando Chomalí.
