PAÍS
Entre líneas se advierte el impacto moderador de la muerte de Sebastian Piñera en la política nacional. El Gobierno experimenta alza en apreciación positiva de su gestión. En la gobernación de la RM, en tanto, se abre a una perspectiva electoral de competencia intensa entre bloques políticos.
El contexto nacional sigue marcado por la tragedia de los recientes incendios en la Región de Valparaíso. Junto con el surgimiento de nuevas aristas de investigación relativas a las responsabilidades de las autoridades edilicias y regionales en la prevención de la tragedia, su impacto alcanza también la realización del Festival Internacional de Viña del Mar. El evento que tiene carácter edilicio divide opiniones entre quienes consideran que se debiera suspender (35%) pues aún no termina la remoción de escombros; quienes opinan que debiera realizarse si lo recaudado se destina a ayuda para los damnificados (43,5%), y un 21,4% que opina que debe realizarse a todo evento por ser una actividad tradicional que lleva alegría a todos.
La política tras la muerte de Sebastian Piñera
Al parecer, luego de la ola de reconocimientos públicos por el aporte y legado político que habría dejado el extinto presidente Sebastián Piñera, y de las controversias en el oficialismo por las declaraciones autocríticas del Presidente Gabriel Boric, el ambiente ciudadano pareció atemperarse por fuera de los extremos.
En materia de aprobación el gobierno obtuvo un repunte de tres puntos y una baja importante en la percepción de que el país está retrocediendo bajo la actual gestión. Tal variación solo se explica a partir de la distensión y cambio de eje comunicacional que se operó en el escenario político con el accidente trágico que le costó la vida a Sebastian Piñera, y a que se experimenta en un plazo muy breve de tiempo (1 semana) y sin cambios significativos en los hechos o indicadores económicos o de bienestar. Tal mejoría se proyecta también a la ministra del Interior, quien habría obtenido además encargos positivos de gestión de la reunión del Cosena.
Congruentemente con lo anterior, la encuesta Signos/El Mostrador de esta semana trae varios cambios significativos comparada con la de la semana anterior. Evelyn Matthei consolida su primer lugar aumentando a 16 puntos su ventaja sobre José Antonio Kast (29,3% versus 13,2%, respectivamente). Esta diferencia, si bien mantiene hace semanas una tendencia, podría estar indicando que ella se beneficia del aporte dialogante atribuido al extinto ex mandatario. Por su parte, Camila Vallejo baja al cuarto lugar del ranking al perder 3,5 puntos porcentuales y marcar 6,8%, mientras Carolina Tohá aumenta a 10,4% y se ubica en tercer lugar, a solo 2,8% de Kast. Michelle Bachelet queda en quinto lugar y marca solo 6,7%. La pérdida de Vallejo puede explicarse por la reacción negativa de su partido, el Comunista, ante la autocrítica de Boric en el funeral de Sebastián Piñera.
En materia de rechazo, Camila Vallejo marca 42,4% quedando en primer lugar, seguida por José Antonio Kast que marca 41,8% Michelle Bachelet 33,5% y Carolina Tohá con 32,9%. Evelyn Matthei solo marca 22,5% lo que demuestra que es una candidata muy transversal y de baja resistencia política en el espectro electoral.
La seguridad sigue siendo la mayor demanda de gestión política (46,8%), y la opción de centro político la marca preferente de los encuestados para un futuro gobierno (46,7%).
La gobernación de la Región Metropolitana
En la evaluación de la RM se producen algunos hechos notorios. En primer lugar, un 67,2% de los encuestados opina que la situación regional viene empeorando. Pero un 41,9% opinan que la gestión del Gobernador Claudio Orrego es buena (37,4) o muy buena (4,5) y solo un 15,5% opina que es mala o muy mala.
Es decir, se produce una nítida separación entre la percepción de estar empeorando y la gestión del gobernador regional, lo que hace suponer que las personas imputan a un tercero la responsabilidad de su percepción negativa, posiblemente la gestión gubernamental central y el tema de la inseguridad.
A continuación, las últimas cuatro diapositivas contienen una medición de escenarios ficticios pero plausibles en materia de competencia electoral aún difusa, donde los nombres cumplen la función simbólica de representar una potencia o categoría política similar al actual ejercicio titular del cargo, aunque ninguno de ellos ha manifestado su voluntad de ser candidato. Su utilidad, dado el actual escenario de fragmentación política, es poner bases objetivas para una prospectiva analítica electoral.
En un escenario ficticio general de 3 candidatos fuertes con Claudio Orrego, Rodrigo Carter y Daniel Jadue como candidatos estos obtienen: 32,7% Orrego; 43,2% Carter y 12,9% Jadue. No sabe 3,1%, Ninguno 7,1%, no votaría 1,5%.
En un escenario ficticio de dos candidatos entre Orrego y Jadue, obtendrían 51,5% versus 15,3% respectivamente. Ninguno subiría a 16,9% y No Votaría a 11,5%.
En un escenario ficticio de dos candidatos entre Orrego y Carter, obtendrían 40,5% versus 45,9% respectivamente. Ninguno sería 6,3% y No Sabe 5,2% .
En un escenario ficticio de dos candidatos entre Jadue y Carter, obtendrían 18,3% versus 55,4% respectivamente. Ninguno sería 8,7% y No Sabe 6,4%
La encuesta es un sondeo de carácter nacional realizado por SignosAnalytics en colaboración con el diario electrónico El Mostrador entre los días 10 y 16 de febrero de 2024. Corresponde a una encuesta probabilística de 1320 (632 para la Región Metropolitana) con un error muestral de 2,6 puntos porcentuales para la muestra nacional y 3,9 puntos porcentuales para la muestra regional, aplicada a un panel con apoyo de instrumentos de IA para mejorar su eficiencia. Está destinada a medir el pulso semanal de los acontecimientos más relevantes de la coyuntura política y generar bases de análisis para la prospección electoral.
