Firmaron más de 700 pero a las once de la mañana en el patio interior del Bar Liguria de Manuel Montt no había más de 30. Muchos de ellos ya identificados con el trabajo en campaña como el actor Francisco Reyes, los hijos de Violeta Parra, Ángel e Isabel y la actriz Catalina Saavedra, que se aclaró el pelo para pasar un poco inadvertida.
La carta en la que urgían a Marco Enríquez y Jorge Arrate a llegar a un acuerdo en nombre de la “mayoría progresista” fue leída por el músico Claudio Narea ex candidato a diputado por el pacto Juntos Podemos. En la misma mesa estaban los pintores José Balmes y Gracia Barrios. Luego habló la vocera Carolina Tohá asegurando que la mayoría de Chile “no es de derecha”, invitando al mundo de la cultura a trabajar unidos por Frei. Entre el público estaba el alcalde en receso Claudio Orrego.
Pero llamó la atención que el ánimo de los presentes no era tan festivo como en los tiempos de la candidata Michelle Bachelet. Los asistentes entraron al patio del bar mientras un músico dispuesto en una esquina tocaba el tema central de El Padrino y luego Francisco Reyes invitó a la concurrencia a seguir bailando, pero no hubo respuesta. Tuvo que intervenir el especialista en arte Jorge Estévez -veterano en campañas desde que fue rostro en la del No- con aplausos y llamados a viva voz para reunir a los presentes en torno a la foto oficial.
Uno de los que no quiso salir, a pesar de la insistencia, fue Patricio Fernández director y fundador de The Clinic, semanario que hace un par de semanas puso en su portada a Frei en un ataúd.
